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Comparación de la Eficacia, Seguridad y Relación Costo-Beneficio de Diversas Estatinas en Pacientes Dislipidémicos con Diabetes
- AUTOR : Bener A, Dogan M, Al-Hamaq A
- TITULO ORIGINAL : Comparison of Efficacy, Safety, and Cost-Effectiveness of Various Statins in Dyslipidemic Diabetic Patients
- CITA : Indian Journal of Pharmacology 46(1):88-93, Ene 2014
- MICRO : La diabetes mellitus implica un riesgo aumentado de complicaciones cardiovasculares, atribuible a la alta tasa de dislipidemia entre los pacientes diabéticos. Las estatinas son fármacos útiles, pero aún no se tienen suficientes datos de eficacia y seguridad sobre ellas.
Introducción y objetivos
La diabetes mellitus (DBT) es una enfermedad ampliamente difundida, con una incidencia en aumento, tanto en los países desarrollados como en aquellos en vías de desarrollo. La región del Medio Oriente ha sido una de las regiones con mayor incremento mundial en el número de pacientes con DBT.
Se sabe que la DBT implica un riesgo de complicaciones cardiovasculares similar al de la enfermedad coronaria, en gran parte atribuible a la elevada tasa de dislipidemia entre los pacientes diabéticos, que es una causa de la alta mortalidad observada en estos pacientes. Las características del lipidograma de las personas con diabetes mellitus tipo 2 (DBT2) incluyen elevaciones del nivel de triglicéridos (TG) > 2 mmol/l y niveles bajos de colesterol unido a lipoproteínas de alta densidad (HDLc). Si bien los niveles del colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad (LDLc) son normales, las partículas son más pequeñas y más densas, lo que se cree que contribuye a aumentar su potencial aterogénico. Se considera que las estatinas son los fármacos de primera línea para el tratamiento de la dislipidemia en los pacientes diabéticos. La información existente sugiere que la rosuvastatina puede ser el agente más efectivo dentro de este grupo de fármacos.
Los objetivos principales de este estudio fueron determinar la eficacia y la rentabilidad (relación costo-beneficio) de las cuatro estatinas (rosuvastatina, atorvastatina, pravastatina y simvastatina) más comúnmente indicadas para el tratamiento de las dislipidemias en los pacientes diabéticos.
Pacientes y métodos
Se trató de un estudio poblacional, observacional, de cohorte, llevado a cabo en un centro especializado en diabetes, en Qatar, entre 2007 y 2012. Se incluyeron 1 542 pacientes diabéticos mayores de 18 años, con diagnóstico de dislipidemia y que recibían alguna de las cuatro estatinas del estudio.
Se consideró confirmado el diagnóstico de diabetes si el paciente presentaba valores de glucemia en sangre venosa ≥ 7 mmol/l o si recibía medicación antidiabética en el momento del ingreso al estudio. Los datos sociodemográficos, antropométricos, de actividad física y de estilo de vida fueron tomados de las historias clínicas de los participantes y de un cuestionario diseñado especialmente para el estudio; los datos de laboratorio fueron extraídos de una base de datos digitalizada. Las mediciones relacionadas con el lipidograma fueron realizadas en muestras obtenidas en ayunas. La información sobre los fármacos administrados fue obtenida de la base de datos de la farmacia.
Se excluyeron los pacientes con trastornos genéticos, historia de angina de pecho, enfermedad vascular grave, nefropatía, hipotiroidismo, enfermedad hepatobiliar activa u otra enfermedad potencialmente mortal. También se excluyeron los pacientes con niveles de creatinquinasa (CK) más de 10 veces por encima del límite superior de la normalidad, los pacientes que recibían corticosteroides, ciclosporina u hormonoterapia, aquellos con historia de abuso de alcohol o drogas y las embarazadas.
Se identificaron grupos de pacientes con diferentes dosis de los fármacos de interés. La cohorte definitiva para el estudio quedó conformada de acuerdo con el fármaco recibido y a la dosis diaria, según el siguiente detalle: atorvastatina 10 mg (n = 150); atorvastatina 20 mg (n = 200); atorvastatina 40 mg (n = 140); pravastatina 20 mg (n = 174); pravastatina 40 mg (n = 160); rosuvastatina 10 mg (n = 300); rosuvastatina 20 mg (n = 222); simvastatina 20 mg (n = 196).
La prueba de la t de Student y la prueba no paramétrica de Mann-Whitney se usaron para evaluar el nivel de significación de las diferencias detectadas entre las medias de dos variables continuas. La prueba de chi al cuadrado y la prueba exacta de Fisher (bidireccional) se utilizaron para evaluar las diferencias entre las proporciones de variables categóricas, entre dos o más grupos. La prueba de ANOVA de Kruskall-Wallis (unidireccional) se usó para las diferencias entre grupos de distintas características. Un valor de p < 0.05 se consideró significativo.
Resultados
La mayoría de los pacientes del estudio eran hombres, casados, de origen catarí, obesos (índice de masa corporal [IMC] > 30 kg/m2; p < 0.001) y que realizaban actividad física moderada. Se encontró que el diagnóstico de DBT2 se había realizado entre 5 y 9 años antes y que la mayoría había recibido educación sobre la enfermedad.
La rosuvastatina en dosis de 10 mg fue el fármaco más efectivo para disminuir los valores de LDLc (28.59%), seguido por la simvastatina 20 mg (16.7%), la atorvastatina 20 mg (21.2%) y la pravastatina 20 mg (21.2%). La rosuvastatina 10 mg fue la más efectiva para reducir los niveles de TG. Todas las estatinas redujeron los niveles de HDLc, en lugar de verificarse un incremento. Ningún paciente mostró elevaciones de las enzimas hepáticas.
Al finalizar los dos años del estudio, el porcentaje de pacientes que había comenzado con albuminuria durante el transcurso del estudio fue menor para el grupo que recibió atorvastatina (10.9%), seguido por el grupo con rosuvastatina (14.2%), el grupo con simvastatina (18.3%) y el grupo con pravastatina (26.6%).
El análisis de rentabilidad mostró que los costos anuales fueron menores para la rosuvastatina en dosis de 10 mg en comparación con la atorvastatina de 20 mg.
Discusión y conclusiones
Este estudio respondió a una creciente conciencia sobre la necesidad de cuidados y prevención específicamente relacionados con la arterioesclerosis en los pacientes diabéticos. La forma de hacerlo fue examinar la eficacia y la seguridad de las cuatro estatinas más frecuentemente indicadas en Qatar (rosuvastatina, atorvastatina, pravastatina y simvastatina). La región del Medio Oriente será la de la más alta tasa de DBT2 en el mundo, según las predicciones. Sin embargo, no existen suficientes datos acerca de la rentabilidad, la eficacia y la seguridad de los fármacos más comúnmente usados para tratar la dislipidemia de los pacientes diabéticos.
Los investigadores del estudio concluyeron que la rosuvastatina (10 mg y 20 mg) fue la droga más efectiva para descender el nivel de LDLc, en comparación con la atorvastatina (10 mg, 20 mg y 40 mg), la pravastatina (20 mg y 40 mg) y la simvastatina (20 mg). Los hallazgos del estudio son concordantes con los de estudios previos, en cuanto a que la rosuvastatina en su dosis más baja (10 mg) fue más efectiva para reducir los niveles de LDLc que la atorvastatina y la pravastatina en sus dosis más altas (40 mg). Estos estudios (MERCURY, STELLAR y PULSAR) concluyeron que la rosuvastatina era también superior para reducir los niveles de TG y de colesterol total, y fue la que produjo menor reducción del nivel de HDLc.
La reducción de los TG ha mostrado ser un objetivo de resultado importante para disminuir el riesgo de enfermedad cardiovascular en los pacientes diabéticos. En este aspecto, si bien todas las estatinas demostraron eficacia en este estudio, la rosuvastatina y la atorvastatina fueron las más efectivas.
La elevación de los niveles de HDLc es otro factor reconocido de protección cardiovascular. En los estudios previos MERCURY, STELLAR y PULSAR, el incremento del HDLc fue significativamente mayor ante la terapia con 10 mg de rosuvastatina, en comparación con la administración de 20 mg de atorvastatina. En el presente análisis, en el cual todas las estatinas parecieron reducir la concentración de HDLc en lugar de observarse un incremento, a la rosuvastatina le correspondió la menor reducción, con lo cual puede considerarse la más efectiva en este aspecto específico. La relación entre los niveles de LDLc, HDLc y TG y el riesgo cardiovascular de los pacientes diabéticos no es una relación simple, como lo demuestra un estudio reciente, el VOYAGER.
Uno de los efectos indeseables más comunes de las estatinas está en la función muscular. Los síntomas musculares pueden ir desde mialgias (dolor muscular sin elevaciones de la CK) a miositis (síntomas musculares con aumento de la CK). En este estudio, los investigadores no hallaron pacientes que presentaran elevaciones de la CK por encima de 10 veces el valor normal con ninguna de las estatinas utilizadas, lo que se considera seguro en lo que respecta a la miositis.
No se comprobaron elevaciones de las enzimas hepáticas, si bien se sabe que la función del hígado puede verse afectada por el uso de las estatinas.
No se encontraron tampoco en el estudio pruebas de alteración en el nivel de creatinina plasmática ni en la filtración glomerular, después de dos años. El incremento de la microalbuminuria (en los pacientes que habían evidenciado microalbuminuria al inicio del estudio) fue mínimo con cualquiera de las estatinas del estudio.
Otros estudios recientes han mostrado que el descenso de los TG y el incremento de los valores de HDLc son de mayor magnitud en los pacientes que reciben estatinas y que además presentan síndrome metabólico. En este estudio, las comparaciones entre los grupos con distintos tratamientos mostraron una ventaja consistente de la rosuvastatina 10 mg para alcanzar los valores deseados de LDLc y de colesterol total.
El análisis farmacoeconómico de los resultados del estudio MERCURY mostró que el tratamiento con rosuvastatina 10 mg presentaba mejor rentabilidad, en comparación con dosis equivalentes de atorvastatina, simvastatina y pravastatina.
En conclusión, este estudio demostró que la terapéutica con estatinas es efectiva para lograr el descenso de los niveles de LDLc y mejorar el lipidograma en los pacientes diabéticos hipercolesterolémicos de alto riesgo. La rosuvastatina, en dosis de 10 mg diarios, fue la estatina más efectiva para reducir el LDLc, los TG y el colesterol total en pacientes diabéticos dislipidémicos.
Ref : ENDO, CLMED, ROSUVAST.
Especialidad: Bibliografía - Clínica Médica - Endocrinología