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Recursos para Evaluar el Desempeño Psicosocial en la Depresión
- AUTOR : Lam RW, Filteau MJ, Milev R
- TITULO ORIGINAL : Clinical Effectiveness: The Importance of Psychosocial Functioning Outcomes
- CITA : Journal of Affective Disorders 132(Supl 1):S9-S13, Ago 2011
- MICRO : Los tratamientos para la depresión no deben enfocarse solamente en la mejoría sintomática sino en el desempeño psicosocial de los pacientes; este aspecto es uno de los objetivos principales a estudiar en los ensayos clínicos sobre el trastorno depresivo mayor.
Introducción
El trastorno depresivo mayor (TDM) es actualmente la cuarta causa de carga económica para la sociedad a nivel mundial y se estima que será la segunda para el año 2030. El TDM causa deficiencia en la calidad de vida y en las relaciones sociales de estas personas.
La cuarta edición del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV) reconoce la importancia del desempeño de las personas con depresión y codifica esa información en el eje V. Además, dentro de los criterios de la enfermedad se mencionan los cambios de los individuos en relación con su estado previo y el deterioro en el contexto social, ocupacional u otras áreas en las cuales la persona se desempeña.
Los tratamientos para el TDM no sólo deben tener en cuenta los síntomas depresivos sino también las dificultades psicosociales que causa la enfermedad. Los pacientes con TDM suelen darle más importancia a la mejoría en el bienestar, la calidad de vida y el desempeño que al alivio sintomático. Por lo tanto, cuando se mide la eficacia de los tratamientos se deben considerar los cambios en los aspectos psicosociales de los individuos afectados. Si las dificultades en el desempeño son una consecuencia importante de la depresión, los estudios futuros deben evaluar la mejoría en estos aspectos. Sin embargo, sólo el 5% de los ensayos clínicos de la depresión informa acerca de los resultados en el desempeño.
En general, los estudios se enfocan en la mejoría sintomática y utilizan la Hamilton Depression Rating Scale o la Montgomery-Åsberg Depression Rating Scale para este objetivo. El DSM-IV mide el desempeño mediante la Global Assessment of Functioning (GAF); no obstante, esta herramienta incluye la gravedad de los síntomas. Para resolver este problema se desarrolló la Social and Occupational Functioning Assessment Scale, que es similar a la GAF pero sólo incluye los aspectos relacionados con el desempeño.
Este estudio tiene por objetivo describir los recursos disponibles para evaluar el desempeño psicosocial.
Resultados en el desempeño
El término «desempeño» puede incluir el concepto de calidad de vida y el de desempeño psicosocial. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la calidad de vida es la «la percepción del individuo de su situación de vida, en el contexto de su cultura y sistemas de valores, en relación con sus objetivos, expectativas, estándares y preocupaciones». En medicina se suele utilizar el concepto de calidad de vida relacionada con la salud, tanto física como mental. En este estudio, el concepto de calidad de vida se usa para englobar ambos términos. Por el contrario, el concepto de
desempeño psicosocial se refiere a la capacidad de la persona para interactuar con los demás de manera satisfactoria, en el trabajo, en el colegio, en la vida matrimonial, entre otras áreas.
Existen muchas escalas disponibles para medir el desempeño. Algunas de éstas comparan el desempeño en los pacientes con trastorno depresivo respecto de la población general, en tanto que otras miden el cambio en el desempeño y son las que se usan en los ensayos clínicos.
Escalas
Una revisión sistemática de 203 ensayos clínicos sobre depresión mostró que sólo 3 de las 20 escalas más utilizadas para evaluar la evolución de los participantes de los estudios estaba relacionada con el desempeño. Las escalas que evalúan este aspecto habían sido usadas sólo en el 5% de los ensayos clínicos. Dado que las dificultades en el desempeño están relacionadas con los síntomas depresivos, la medición de los cambios en este ámbito aporta más información que la evaluación sintomática solamente. Una revisión de ensayos clínicos halló que existe escasa relación entre las evaluaciones de ambos parámetros, es decir, que no hay una relación totalmente directa entre la remisión sintomática y la mejoría en el desempeño psicosocial. Esto indica que hay otros factores además de los síntomas y los efectos adversos que impactan en la mejoría en el desempeño de los pacientes depresivos.
En general, varios factores diferencian las escalas utilizadas; por ejemplo, las completadas por el paciente o por el médico. Las herramientas de evaluación que completa el clínico pueden tener la ventaja de que éste tiene experiencia en la temática a evaluar; sin embargo, la desventaja reside en que se necesita un profesional entrenado para realizarlas y el tiempo para administrarlas. Por otro lado, las escalas que completa el paciente son simples y fáciles de usar. Al completarlas, el paciente monitoriza su evolución, lo que mejora la adhesión al tratamiento. Sin embargo, las respuestas del paciente pueden estar influenciadas por la propia enfermedad y por su visión negativa de la realidad.
Las escalas globales están compuestas por un ítem o más y aportan información breve. Las escalas específicas son más extensas y aportan más datos, pero son menos útiles en la práctica por su extensión. La elección de la escala depende de la utilidad que se le va a dar. Por ejemplo, los estudios que evalúan las causas y los factores que influyen en la aparición de la depresión requieren escalas específicas del desempeño psicosocial; en cambio, los ensayos que comparan la discapacidad funcional en diferentes trastornos necesitan escalas que no sean específicas de una sola enfermedad. Las escalas que se utilizan en el consultorio deben ser breves y fáciles de entender.
Varias escalas evalúan el desempeño. Una de ellas es la Medical Outcomes Study SF-36, una escala de calidad de vida de 41 ítems que evalúa los síntomas, la salud física, la satisfacción a nivel familiar y laboral y el deterioro. Una escala más específica para los trastornos psiquiátricos es el Quality of Life Enjoyment and Satisfaction Questionnaire, que se ha utilizado en muchos ensayos clínicos, aun en estudios a corto plazo de las fases agudas de la depresión y la ansiedad. La Quality of Life in Depression Scale (QLDS) tiene 34 ítems que evalúan la calidad de vida, específicamente en pacientes depresivos, en relación con la capacidad del individuo de satisfacer sus necesidades. La QLDS se ha utilizado en ensayos clínicos sobre antidepresivos.
Mientras que existen muchos estudios que evalúan el desempeño social en la depresión, pocos ensayos clínicos miden la calidad de vida. Los datos acerca del desempeño aportan información adicional acerca de los síntomas residuales y las diferentes respuestas al tratamiento. Es importante destacar que la mejoría en el desempeño no es proporcional a la remisión sintomática. Aunque la mejoría en el desempeño psicosocial puede demostrarse en el corto plazo, en estudios de 8 semanas o menos, puede llevar 12 meses o más igualar el desempeño al nivel de la población general.
La depresión suele disminuir la atención, el interés y la motivación. El 79% de las personas depresivas informa dificultades en el trabajo. Aunque el costo del ausentismo por depresión es alto, es mayor el costo por la disminución en la productividad al concurrir al trabajo. Algunas escalas se utilizan para medir la productividad y el desempeño laboral. La Sheehan Disability Scale es un ejemplo de una herramienta de evaluación de un solo ítem que analiza el desempeño laboral. La mayoría de las escalas que miden la calidad de vida incluyen al menos un ítem que evalúa este aspecto. Por su parte, las escalas de productividad laboral son más específicas sobre las dificultades en el trabajo. Algunos ejemplos son el Work Limitations Questionnaire y la Stanford Presenteeism Scale. La más importante es el Health and Work Performance Questionnaire de la OMS, aunque es muy largo para utilizar en el consultorio. La Employment Absence and Productivity Scale fue desarrollada para utilizar en la práctica diaria en los pacientes depresivos, ya que consiste en 7 ítems y se puede completar en 3 a 5 minutos. El desempeño psicosocial, que incluye la calidad de vida y el desempeño social y laboral, es sin duda la mayor preocupación en los pacientes con TDM. Por lo tanto, al evaluarlos es necesario medir este aspecto.
Conclusión
Varios recursos evalúan el desempeño psicosocial en pacientes depresivos y algunos son específicos para medir los cambios en esta área durante el tratamiento. La selección de estas herramientas depende del objetivo buscado. Sin embargo, a pesar de la importancia de los resultados en el desempeño en el tratamiento de estos pacientes, los recursos para medirlo son poco utilizados. Los tratamientos para la depresión no deben enfocarse solamente en los síntomas. Dada la importancia del desempeño psicosocial para el paciente y para la sociedad, este aspecto debe ser uno de los principales objetivos a estudiar en los ensayos clínicos sobre el TDM, en especial al evaluar la eficacia de los nuevos tratamientos para este trastorno.
Ref : PSIQ.
Especialidad: Bibliografía - Psiquiatría