Ejercicio después de la Ingesta de Cafeína y Cambios en los Ácidos Grasos Plasmáticos

• AUTOR : Olcina G, Muñoz D, Kemp J, Maynar M
• TITULO ORIGINAL : Total plasma fatty acid responses to maximal incremental exercise after caffeine ingestion
• CITA : Journal of Exercise, Science and Fitness 10: 33-37, 2012
• MICRO : La ingesta de cafeína antes del ejercicio proporciona un beneficio energético a los individuos no entrenados. Además, la interacción de ambos factores genera cambios potencialmente saludables en el perfil de ácidos grasos plasmáticos luego del ejercicio.

Introducción

Hay una clara conexión entre el perfil de ácidos grasos libres (AGL) y la salud. Mientras que los AGL saturados se asocian con hipertensión, obesidad y otros factores de riesgo, los AGL insaturados podrían jugar un papel protector a nivel cardiovascular y metabólico. El ejercicio aeróbico induce alteraciones en el perfil de AGL que llevan a mejores perspectivas en cuanto a la salud. Algunas sustancias están señaladas como beneficiosas para el perfil de AGL, y entre ellas, está la cafeína. Este alcaloide puede mejorar la movilización de los ácidos grasos desde sus depósitos en el tejido adiposo hacia las mitocondrias para su oxidación durante la actividad física, pero existe escasa información sobre los cambios en el perfil de cada AGL, en particular, luego de una combinación de ingestión de cafeína y ejercicio físico. La combinación de ambos factores podría tener mayores efectos en la lipólisis y en las concentraciones plasmáticas de algunos AGL en particular que cada estímulo por separado.

El objetivo de este estudio es la evaluación del efecto de la ingesta de cafeína en el desempeño en una prueba de ejercicio incremental y las modificaciones asociadas en el perfil de AGL plasmáticos.

Materiales y métodos

Participantes

Los participantes fueron 20 varones que negaron el consumo rutinario de cafeína y se habían ejercitado durante menos de una hora a la semana por los seis meses anteriores al estudio. Ninguno de los participantes tenía antecedentes de haber entrenado para pruebas de resistencia.

Los participantes no recibieron ningún suplemento nutricional previamente ni durante el estudio. Durante la semana de las pruebas, la dieta de los participantes fue controlada, con un límite de 2 000 a 2 500 kcal/día. El desayuno previo a la prueba fue estandarizado para todos los participantes y consumido 3 horas antes del ejercicio.

Diseño del experimento

Se utilizó un protocolo de diseño cruzado, a doble ciego y aleatorizado, en el que cada participante realizó dos ejercicios de intensidad creciente en bicicleta, bajo los efectos de una cápsula de 5mg/kg de cafeína o placebo (una cápsula vacía). Las dos pruebas fueron realizadas por la mañana, con 3 días de separación para asegurar una recuperación satisfactoria.

Mediciones

Se midieron los gases espirados, la ventilación y la frecuencia cardíaca. Se obtuvieron muestras de sangre antes de la ingestión del placebo o de la cafeína y, también, inmediatamente después del ejercicio, para medir la concentración plasmática de cafeína y el perfil de AGL. Con las concentraciones individuales de ácidos grasos, se calcularon los índices de actividad de las delta-desaturasas, enzimas que convierten a los ácidos grasos saturados en no saturados. La determinación del nivel de cafeína fue efectuada para asegurar que no hubiera habido ingestión del alcaloide antes de la prueba y para medir las concentraciones en plasma luego de la administración de la cápsula.

Resultados

Bajo los efectos de la cafeína, los participantes pedalearon por más tiempo, con mayor entrega total de energía y consumo de oxígeno, y frecuencia cardíaca más elevada que luego del placebo. Además, decayó el cociente de intercambio respiratorio.

Se incrementó significativamente la concentración plasmática de AGL saturados en la prueba con cafeína. Individualmente, los únicos ácidos grasos saturados que variaron sus concentraciones en forma significativa fueron el ácido araquídico (C20:0), que decayó, y el ácido esteárico (C18:0), que aumentó. Además, decreció la concentración de ácido transoleico (C18:1t), un AGL monoinsaturado. Por último, se observó una merma en la actividad de la delta 9.2 desaturasa.

Discusión

El estudio demostró una mejora en el rendimiento físico, manifestada en considerables aumentos en el tiempo de fatiga, la entrega total de energía y el consumo máximo de oxígeno luego del consumo de cafeína, un hecho que coincidió con lo encontrado en estudios previos. Sin embargo, este compuesto se asocia con cambios en la percepción subjetiva del esfuerzo, antagonismo de receptores de adenosina, atenuación del dolor y un estado psicológico de excitación, lo cual puede haber contribuido con el resultado observado.

La ingesta del alcaloide se relacionó también con un incremento en la oxidación de grasas reflejada indirectamente en la caída del cociente de intercambio respiratorio, que sugiere un uso menor de glucógeno y una producción menor de metabolitos de la glucólisis.

Como novedad, se observó una proporción distinta de AGL plasmáticos en comparación con el placebo. El aumento de los AGL saturados reflejaría su mayor movilización en presencia de cafeína.

El aumento de la concentración de ácido esteárico (C18:0) y la disminución del ácido transoleico (C18:1) se corresponde con la merma en la actividad de la delta 9.2 desaturasa, lo que sugiere que dicha enzima es inhibida por la cafeína. Sin embargo, se requieren mediciones directas de la actividad de la enzima para verificar esta afirmación.

La disminución del ácido transoleico circulante confiere un potencial beneficio para la salud y podría ser el camino para demostrar que el ejercicio con cafeína reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Es importante considerar que los efectos en el perfil de AGL no pueden ser atribuidos exclusivamente a la cafeína. Por ejemplo, los incrementos propuestos en la movilización y la oxidación de los AGL podrían ser consecuencia de las mayores demandas energéticas de un ejercicio de mayor duración y mayor entrega de energía, como el de la prueba posterior a la administración de cafeína.

Conclusión

Quedó demostrado que la ingesta de 5 mg/kg de cafeína unos 60 minutos antes del ejercicio proporciona un beneficio energético a los individuos no entrenados. Además, la interacción de esta dosis del alcaloide y el rendimiento mejorado en el ejercicio lleva a cambios en el perfil de AGL plasmáticos, con variaciones específicas en AGL individuales.

Ref : NUTRI, CLMED.

Especialidad: Bibliografía - Clínica Médica - Nutrición