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Evalúan la Eficacia de las Nuevas Fórmulas de IR3535 como Repelente de Mosquitos y Garrapatas de Patas Negras
- AUTOR : Carroll S
- TITULO ORIGINAL : Prolonged Efficacy of IR3535 Repellents Against Mosquitoes and Blacklegged Ticks in North America
- CITA : Journal of Medical Entomology 45(4):706-714, Jul 2008
- MICRO : Las nuevas fórmulas disponibles de IR3535, con mayores concentraciones del producto, incrementaron su eficacia como repelente de mosquitos y garrapatas, con un período total de protección que supera las 7 horas.
Introducción
En los EE.UU., la preocupación por las enfermedades transmitidas por artrópodos se incrementó en los últimos años. No obstante, una de las estrategias más difundidas para protegerse de las picaduras es el uso de repelentes tópicos.
El etil butilacetilaminopropionato (IR3535) es un repelente de insectos y una molécula sintética derivada del aminoácido beta alanina. Este repelente se comercializa en Europa desde 1970 y se introdujo en los EE.UU. en 1999. En comparación con otros repelentes, como el N,N-dietil-3-metilbenzamida (DEET), existen pocos estudios que evalúen la eficacia del IR3535. Una medida que habitualmente se usa para evaluar la eficacia de estos repelentes es el tiempo de protección total (TPT), que es el período que transcurre entre la aplicación del producto y la aparición del primer fracaso confirmado (PFC) en la protección que ofrece. El PFC es un evento que se vuelve a repetir dentro de un lapso de 30 minutos (por ejemplo, el evento se produce cuando el mosquito se posa sobre la piel con la intención de picar o cuando la garrapata cruza por el área tratada con repelente). En comparación con el efecto del DEET y otros ingredientes activos presentes en otros repelentes, el efecto del IR3535 es moderado.
Los siguientes estudios fueron realizados para evaluar el efecto repelente de nuevas fórmulas de IR3535, con el propósito de que sean registrados en la US Environmental Protection Agency.
Materiales y métodos
Doce individuos participaron en un estudio preliminar que examinó las conductas relacionadas con la dosificación del producto y 10 fueron incluidos en otra investigación que evaluó la eficacia de distintas presentaciones (loción, spray y aerosol) de IR3535. La edad de los sujetos quedó comprendida entre los 19 y 44 años. Ninguno de ellos empleó repelentes durante la semana previa a la selección, ni formó parte del equipo de investigación. En el caso de las mujeres, se realizaron pruebas para descartar posibles embarazos y las que fueron reclutadas refirieron no estar amamantando. Todos los sujetos evaluados firmaron un consentimiento informado.
El estudio preliminar para determinar las dosis que se emplean habitualmente se llevó a cabo en un laboratorio de Davis durante el mes de octubre de 2006. En esta investigación participaron 7 mujeres y 5 hombres. En cada caso, antes de la aplicación de IR3535, se calculó el área de superficie de cada miembro y, para poder determinar la dosificación promedio de cada presentación (loción, spray o aerosol) del repelente, se les solicitó a los participantes que utilizaran el método que consideraran más adecuado para lograr la cobertura completa (capa continua del material evaluado) sobre los 4 miembros. Cada participante efectúo una serie de 3 aplicaciones en cada miembro. Todas las aplicaciones se efectuaron al aire libre y se efectuó el lavado de los miembros antes y después de éstas. Para evaluar la dosis empleada en cada aplicación se pesaron los envases de loción antes y después; esto permitió calcular la cantidad de gramos empleados por unidad de superficie del miembro tratado. En el caso de los sprays y los aerosoles, se emplearon dosímetros en forma de brazalete que se colocaron en cada uno de los miembros evaluados y que se pesaron antes de la aplicación y un minuto después de ésta. A partir de estos procedimientos, se obtuvieron 3 medidas (una para la loción, una para el aerosol y una para el spray) en cada miembro de cada uno de los participantes. Luego, se calculó el promedio de las dosis sobre la base de las diferencias observadas de peso (ya sea en los envases de loción o en los dosímetros) para cada tipo de repelente. En el caso de los repelentes en spray o loción, la diferencia del peso de los dosímetros se multiplicó por el cociente entre el área de superficie del miembro y el área de superficie del dosímetro. Al dividir las dosis obtenidas por el área de superficie de cada miembro, se obtuvieron los índices de dosificación de cada uno y se informaron en g/cm2. Finalmente, se calculó el promedio del índice de dosificación de los miembros superiores y el correspondiente a los miembros inferiores.
Para evaluar el efecto repelente contra los mosquitos se llevó a cabo un trabajo de campo entre el 25 de octubre y el 19 de noviembre de 2006, en el que se evaluaron los diferentes tipos de repelentes en distintos tipos de hábitat. El efecto de la loción y el spray se evaluó en un hábitat selvático (Butte County) y en una zona de pantanos (Glenn County), mientras que el efecto del aerosol se examinó en el paraje selvático y en una pradera (Merced County). Estas zonas difieren en la abundancia relativa de distintas especies de mosquitos; sin embargo, en todos ellos predominó el Aedes melanimon.
Las dosis de repelente se calcularon para cada uno de los casos sobre la base del área de superficie de sus miembros. Los tratamientos en spray y loción se aplicaron en los segmentos inferiores de brazos y piernas, aunque el aerosol sólo se aplicó en miembros inferiores. En los sujetos que participaron en distintas pruebas, el tratamiento se empleó en un miembro diferente. Sobre la base de las dosis obtenidas en el estudio preliminar, se calcularon las dosis para cada tipo de presentación del repelente. Antes de colocar el repelente, los pacientes higienizaron sus miembros y los secaron con toalla. Todos los individuos vistieron overoles blancos con mangas y piernas enrollables para facilitar la aplicación del repelente. En los controles se efectuaron los mismos procedimientos.
Los períodos de exposición a los mosquitos duraron un minuto y se efectuaron cada 15 minutos. Los sujetos expuestos portaron aspiradoras mecánicas a batería y fueron divididos en pares. A cada par se le indicó que, durante los períodos de exposición, observaran los miembros expuestos y los de sus compañeros, para detectar los mosquitos que establecieron contacto con la piel con la intención de picar. Al inicio de cada período de exposición, los individuos enrollaron las mangas o los pantalones de los overoles para dejar al descubierto las zonas a evaluar. Los mosquitos que establecieron contacto con la piel fueron extraídos mediante aspiración. Cada uno de estos eventos fue informado al cuerpo técnico, que los registró según el código del participante y el momento que marcó el reloj durante el período de exposición. Los sujetos cubrieron la zona expuesta si el evento se repetía dentro de un mismo período de exposición o si otro evento había tenido lugar durante alguno de los 2 períodos previos.
Durante los períodos de exposición, los sujetos controles cubrieron los miembros expuestos inmediatamente después de que un mosquito estableciera contacto con la piel. En la mayoría, las exposiciones duraron menos de un minuto. La presencia de mosquitos en la zona expuesta se registró con el número 1 y la ausencia, con el 0. Los mosquitos capturados mediante aspiración se agruparon según el período de exposición en el que fueron atrapados. Luego, fueron congelados para un análisis posterior.
La evaluación del efecto de las presentaciones del repelente contra la garrapata de patas negras se llevó a cabo en un laboratorio. Este tipo de garrapatas transmite espiroquetas, que causan la enfermedad de Lyme en los seres humanos y las mascotas. Habitualmente, se adquiere durante el estadio de larva y se transmite durante el estadio de ninfas. Las ninfas de esta garrapata fueron provistas por el University of Rhode Island Tick Laboratory. La eficacia se midió de acuerdo con la capacidad del repelente para impedir un desplazamiento de 3 cm o mayor sobre las zonas de la piel tratadas con el producto. Las exposiciones comenzaron a los 15 minutos de haber aplicado el producto. Antes de cada exposición, las garrapatas se ubicaron sobre el miembro superior sin producto para examinar la capacidad de desplazamiento. Para facilitar este procedimiento se marcaron 3 puntos a lo largo de cada antebrazo, separados por una distancia de 3 cm (uno en la palma, otro en la muñeca y otro en el antebrazo, en dirección al codo). En el brazo con repelente, el punto de la muñeca coincidió con el margen del área tratada. Se formaron grupos de 4 personas y las exposiciones comenzaron casi al mismo tiempo. Los sujetos emplearon pinceles para ubicar las garrapatas sobre el punto de la palma de la mano en el brazo sin repelente. Para ser incluida en el estudio, ésta debía ser capaz de trasladarse hasta el tercer punto, en un lapso de 3 minutos. Las garrapatas que cumplían con este criterio fueron inmediatamente trasladadas al brazo con repelente. Se consideró que la garrapata fue repelida cuando cambió la orientación de su trayectoria, alejándose de la zona tratada, o se desplazó en forma paralela al margen de esta zona, o cuando no pudo desplazarse más de 3 cm dentro de la zona tratada en un período de 3 minutos. Algunos participantes revaluaron las garrapatas reposicionándolas unas 2 o 3 veces dentro de un mismo período de exposición, para confirmar los criterios de repulsión. A las garrapatas que recorrieron al menos 3 cm (en dirección al codo) dentro del área tratada se les otorgó un puntaje que indicó que atravesaron la zona del repelente de manera satisfactoria. Durante cada exposición se utilizó una garrapata diferente. La exposición concluyó cuando la garrapata logró atravesar el área tratada en 2 períodos consecutivos de exposición o en 2 de 3 períodos consecutivos de exposición.
Al efectuar el análisis se emplearon como medidas el TPT y el PFC. El promedio del TPT se calculó para cada uno de los participantes y se informó junto con la desviación estándar y un intervalo de confianza del 95%. En algunos casos, los registros quedaron truncos debido a que los individuos abandonaron las pruebas de manera voluntaria (por ejemplo, al llegar la noche en aquellos que se efectuaron en hábitats naturales o cuando los períodos de prueba fueron muy prolongados).
Resultados
Al analizar las dosis empleadas durante el estudio preliminar se detectó que la cantidad de loción empleada entre los sujetos evaluados varío unas 3 veces; en el caso del spray, unas 6 veces y, en el caso del aerosol, 7 veces. La cantidad promedio de aerosol aplicada sobre los brazos duplicó la del spray. La dosis de loción aplicada en los brazos fue intermedia, aunque la dosis de las piernas fue la más alta de las tres presentaciones del repelente. Todas las dosis observadas en el análisis fueron inferiores a las dosis estándares recomendadas.
Durante las pruebas de eficacia, que evaluaron el efecto repelente contra los mosquitos, los controles no tratados expusieron alguno de sus miembros durante el minuto correspondiente a cada período de exposición. La llegada de un mosquito dentro de este período finalizó la exposición de manera inmediata. En las 6 pruebas que se realizaron (una para cada presentación del repelente en 2 hábitats diferentes), sólo en el 3% a 10% de las exposiciones no se pudo detectar la presencia de mosquitos sobre el área expuesta de la piel. Este hallazgo demostró que la presión ambiental fue lo suficientemente importante en más del 90% de las exposiciones.
Durante las primeras horas de exposición, en cada una de las pruebas efectuadas, los mosquitos no establecieron contacto con las zonas tratadas de la piel, incluso en los casos en los que existió una demora de 2 o 3 horas entre la aplicación y la primera exposición.
Las tres presentaciones del repelente protegieron a los participantes durante un período de 7 horas o más. En el caso de la loción y el aerosol, algunos períodos de exposición quedaron truncos, lo que modificó la media y la variación de estas variables, debido a que los participantes abandonaron la prueba antes de que los mosquitos entraran en contacto con la piel. Por este motivo, los intervalos de confianza del TPT fueron bastante estrechos. La frecuencia con la que los mosquitos establecieron contacto con la zona tratada fue mayor con el repelente en spray y menor con el aerosol. Estas diferencias probablemente sean consecuencia de la concentración de IR3535 en cada presentación o de la dosificación. Al igual que el aerosol, el spray contiene IR3535 al 20%; sin embargo, la dosis de spray empleada fue la menor de todas las presentaciones. La mejor combinación entre la concentración y la dosis se obtuvo en el caso del aerosol, que fue el que presentó el mayor efecto repelente.
A. melanimon fue la especie que representó más del 90% de los mosquitos recolectados durante la mañana y las primeras horas de la tarde, mientras que en las últimas horas de la tarde predominaron otras especies, algunas pertenecientes a otros géneros.
En relación con el efecto repelente contra las garrapatas, se observó que éstas lograron atravesar la zona tratada en menos del 5% de las exposiciones. La mayoría de las garrapatas repelidas cambiaron la trayectoria al aproximarse a los márgenes de la zona tratada, cambiaron de dirección o se desplazaron en círculos en la zona de la muñeca, cerca del área con repelente. Aquellas que lograron atravesar el área tratada no pudieron alcanzar el codo y cambiaron la trayectoria o se desprendieron del brazo. El TPT estimado para las garrapatas de patas negras fue de 9 horas o mayor. Los mejores resultados se obtuvieron con la presentación en spray, a pesar de que la dosificación empleada fue la más baja.
Discusión
Esta investigación difiere de otras, debido a que incluyó un estudio preliminar que permitió examinar las conductas relacionadas con la dosificación de cada una de las presentaciones del repelente. Los hallazgos de este estudio se utilizaron posteriormente para calcular las dosis para las pruebas de eficacia. Asimismo, las dosis promedio que se obtuvieron durante este análisis fueron inferiores a las recomendadas por la industria (por ejemplo, 1 ml/600 cm2). En comparación con esta última dosis, la cantidad de loción calculada fue un 25% menor, la del aerosol, del 7% al 32% menor y la del spray, del 55% al 65% inferior.
Durante las pruebas de eficacia quedó demostrado que la loción de IR3535 al 10% y la de aerosol y spray al 20% brindaron protección contra los mosquitos por períodos prolongados dentro del hábitat natural de estos insectos. Dentro de las especies identificadas, muchas pertenecían a los tres géneros de mayor relevancia en el campo de la salud pública: Aedes, Culex y Anopheles. Para las tres presentaciones del producto, el promedio de contactos que establecieron los mosquitos con las áreas tratadas de la piel fue muy bajo (menor de 2) durante todo el lapso de exposición. Esta observación sugiere que el efecto repelente contra los mosquitos de las tres presentaciones es excelente.
En el caso de las garrapatas de patas negras, se observó que éstas no lograron cruzar las áreas tratadas durante un período de exposición de 15 horas en los individuos mejor protegidos. También es importante aclarar que muchas de las que lograron hacerlo no alcanzaron el codo y se desprendieron del brazo.
Habitualmente, la eficacia de los repelentes contra las garrapatas es menor que la que se observa contra los mosquitos. La mayoría de los productos que contienen DEET o picaridin ofrecen protección por períodos cortos; sin embargo, distintas pruebas demostraron que, con IR3535, el efecto repelente es más prolongado.
Conclusión
Las tres presentaciones de IR3535 brindaron protección prolongada contra los mosquitos y las garrapatas de patas negras, incluso en dosis bajas. Los TPT contra los mosquitos fueron similares a los observados con otros productos (DEET y picaridin), mientras que aquellos contra las garrapatas excedieron ampliamente los de estos últimos. Estos hallazgos sugieren que con las nuevas fórmulas de IR3535 (en concentraciones del 10% o mayores), la eficacia se incrementó. La eficacia demostrada, sumada al perfil de seguridad, convierte a IR3535 en un producto de gran utilidad en la protección contra las picaduras de artrópodos y las enfermedades transmitidas a los seres humanos.
Especialidad: Bibliografía - Dermatología