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Aumento del Riesgo de Conducta Suicida en Pacientes Bipolares que Reciben Antipsicóticos
- AUTOR: Yerevanian BI, Koek RJ, Mintz J
- TITULO ORIGINAL: Bipolar Pharmacotherapy and Suicidal Behavior – Part 3: Impact of Antipsychotics
- CITA: Journal of Affective Disorders 103(1-3):23-28, Nov 2007
- MICRO: Los profesionales deben estar atentos al prescribir antipsicóticos a pacientes bipolares debido a la posibilidad de que se asocien con aumento del riesgo de conducta suicida.
Introducción y objetivos
Los pacientes bipolares pueden recibir antipsicóticos (AP) de primera y segunda generación. En el primer caso, el empleo se asocia con el tratamiento de la manía y de la psicosis aguda. En cambio, los agentes atípicos son eficaces para el tratamiento de mantenimiento en caso de manía y de depresión bipolar. Los agentes atípicos aprobados por la Food and Drug Administration para este propósito son la olanzapina, la risperidona, la quetiapina, la ziprasidona y el aripiprazol. Es decir, el empleo de AP atípicos en pacientes bipolares puede tener lugar en las diferentes fases de la enfermedad. Este empleo se encuentra incluido en las principales normativas de tratamiento del trastorno bipolar.
Según manifiestan los autores, son pocos los datos respecto del efecto de los AP sobre la conducta suicida en los pacientes bipolares. Se informó que la clozapina disminuye la cantidad de intentos de suicidio y de hospitalizaciones debido a la tendencia suicida, en pacientes esquizofrénicos. Este efecto sería superior en comparación con el observado al administrar olanzapina. Asimismo, se postuló que la clozapina tendría un efecto similar en los pacientes bipolares. No obstante, este efecto no fue estudiado adecuadamente ya que la clozapina sólo se empleó en casos refractarios al tratamiento. En otro estudio se sugirió que los AP de segunda generación tienen un efecto protector ante la tendencia suicida en pacientes esquizofrénicos o con trastorno esquizoafectivo. La administración de quetiapina a pacientes con depresión bipolar se asoció con disminución del puntaje correspondiente al suicidio de la Montgomery Asberg Depression Rating Scale, en comparación con la administración de placebo. No obstante, también se informó que la administración de AP atípicos se asocia con aumento de la prevalencia de ideación suicida en pacientes bipolares. En cambio, en otro estudio se halló una disminución del puntaje de la Hamilton Depression Rating Scale Suicidality, luego de 1 a 2 semanas de tratamiento con olanzapina en pacientes bipolares que cursaban un episodio mixto. Es decir, los resultados de los estudios son heterogéneos.
En el presente estudio, los investigadores evaluaron la relación entre la conducta suicida y el tratamiento AP en pacientes con trastorno bipolar.
Pacientes y métodos
Este estudio retrospectivo incluyó a 405 pacientes bipolares evaluados durante un período de 8 años, cuyos registros médicos se analizaron para la obtención de los datos. Se prestó especial atención al estado clínico, al tratamiento farmacológico y a la aparición de eventos suicidas. Mientras que estos eventos fueron la variable dependiente, el tratamiento farmacológico recibido cada mes fue la variable independiente. Se informaron los resultados relacionados con la monoterapia AP o con la administración combinada de AP y estabilizadores del estado de ánimo (EEA).
Resultados
Los pacientes fueron divididos en grupos según el tratamiento combinado con EEA y AP o la administración de monoterapia con alguno de los 2 tipos de fármacos. Los grupos fueron similares en términos de edad y sexo. Cerca de la mitad de los participantes había recibido terapia combinada de mantenimiento o monoterapia AP durante al menos 1 mes. El tratamiento con AP se asoció con aumento de las probabilidades de trastorno esquizoafectivo de tipo bipolar y con disminución de la probabilidad de diagnóstico de trastorno bipolar de tipo II, en comparación con la monoterapia con EEA. Los autores observaron un aumento significativo de la frecuencia de suicidio entre los pacientes tratados con EEA combinados con AP, en comparación con la monoterapia con EEA. La frecuencia de eventos suicidas fue casi 10 veces superior entre los pacientes que recibieron monoterapia AP en comparación con aquellos tratados con monoterapia con EEA. Al comparar las 3 opciones de tratamiento farmacológico se observó que la incidencia general de eventos suicidas fue máxima entre los pacientes tratados con monoterapia AP. En segundo lugar se ubicó la terapia combinada, en tanto que la monoterapia con EEA se asoció con la frecuencia más baja de intentos de suicidio.
Discusión
De acuerdo con los resultados del presente estudio naturalista efectuado en pacientes bipolares, el riesgo de conducta suicida asociado con la administración de AP es elevado en comparación con la monoterapia con EEA. La monoterapia AP se asoció con un riesgo de conducta suicida 10 veces superior en comparación con el riesgo observado al administrar monoterapia con EEA. En cuanto a la terapia combinada con ambos tipos de fármacos, el riesgo de conductas suicidas fue intermedio. Es decir, el tratamiento con AP se asoció con aumento significativo del riesgo de conducta suicida no letal. En consecuencia, los profesionales deben estar atentos al prescribir AP a pacientes bipolares debido a la posibilidad de que este tratamiento no produzca una disminución del riesgo de suicidio. Por el contrario, existe la posibilidad de observar un aumento de este riesgo, concluyen los autores. Por lo tanto, son necesarios estudios adicionales al respecto.
Especialidad: Bibliografía - Psiquiatría