El Efecto del Agregado Diario de Barras con Frutas y Nueces en la Dieta

• AUTOR : Davidi A, Reynolds J, Katz DL y colaboradores
• TITULO ORIGINAL : The Effect of the Addition of Daily Fruit and Nut Bars to Diet on Weight, and Cardiac Risk Profile, in Overweight Adults
• CITA : Journal of Human Nutrition and Dietetics 24(6):543-551, Dic 2011
• MICRO : El consumo diario de 2 barras con frutas y nueces no indujo aumento de peso, cambios en la presión arterial o en el perfil lipídico en adultos con sobrepeso. Se requieren más estudios para determinar el efecto del consumo a largo plazo de colaciones ricas en nutrientes sobre el aumento de peso y la calidad de la dieta.

Introducción

La epidemia mundial de obesidad en adultos y en niños, junto con las comorbilidades asociadas, constituye uno de los problemas más importantes de la salud pública. En la actualidad, la Organización Mundial de la Salud estima que más de un billón de adultos presenta obesidad. La obesidad visceral, una de las características distintivas del síndrome metabólico, se acompaña por diversas alteraciones metabólicas que tienen efecto en la incidencia de enfermedad cardiovascular, independientemente de la obesidad general. La causa de la obesidad es el desequilibrio energético, ya que las calorías incorporadas superan las calorías utilizadas.

Diversos estudios han demostrado que, en las últimas tres décadas, los adultos y los niños han aumentado sustancialmente la frecuencia de consumo de snacks. Si bien los resultados científicos aún no han podido determinar la contribución de este comportamiento en la obesidad, los autores sostienen que no hay dudas de que los snacks que se consumen tienen muchas calorías y pocos nutrientes.

Por otro lado, los resultados de los estudios epidemiológicos y los ensayos clínicos aleatorizados destacan los efectos positivos sobre la salud del consumo de nueces, frutas y vegetales. Diversas investigaciones han demostrado una asociación entre el consumo de nueces y la disminución en el riesgo de enfermedad coronaria, que se debe parcialmente a sus propiedades hipocolesterolémicas. Asimismo, las frutas y los vegetales son ricos en antioxidantes, vitaminas y fibras, que reducen los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, tales como la inflamación y el estrés oxidativo. Más aún, el consumo de nueces, frutas y vegetales ha sido asociado con la disminución de la presión arterial.

Debido a la prevalencia actual de síndrome metabólico en los EE.UU., a los niveles en el aumento de consumo de snacks poco saludables y a los resultados que demuestran que una brecha de energía diaria de tan sólo 100 kcal puede ayudar a prevenir el aumento de peso, las estrategias que permitan aumentar la saciedad con menores niveles de energía podrían ser útiles para la prevención de la obesidad.

Este estudio aleatorizado se realizó con el objetivo de examinar los efectos de las barras con frutas y nueces en las mediciones antropométricas, el perfil de lípidos y la presión arterial en adultos con sobrepeso.

Materiales y métodos

En el presente ensayo se incluyeron 94 adultos con sobrepeso, con los siguientes criterios de inclusión: hombres y mujeres > 18 años en los que se pudiera tomar la presión arterial bilateralmente, con sobrepeso y un índice de masa corporal (IMC) > 25.0 kg/m2 y uno o más factores de riesgo de resistencia a la insulina.

El estudio fue aleatorizado, controlado y diseñado para evaluar los efectos del consumo diario de 2 barras con frutas y nueces (80 g en total), durante 8 semanas, sobre la presión arterial, el perfil lipídico y las medidas antropométricas (IMC y circunferencia de la cintura).

Resultados

Cuarenta y cinco individuos fueron asignados al grupo control y 49 al grupo de intervención. De los 94 participantes incluidos, 89 completaron el estudio y 5 lo abandonaron. Los grupos estuvieron equilibrados respecto del sexo y la edad y en términos de las medidas antropométricas basales, el perfil de lípidos y la presión arterial.

Las mediciones antropométricas (IMC, peso corporal y circunferencia de la cintura) no mejoraron respecto de los valores basales luego del consumo de las barras con frutas y nueces en comparación con el grupo control (p = 0.40, 0.44 y 0.69, respectivamente). Por su parte, los niveles de lípidos -colesterol total (CT), lipoproteínas de alta densidad (HDL), la relación entre CT y HDL, lipoproteínas de baja densidad (LDL) y triglicéridos- tampoco mejoraron respecto del control (p = 0.72, 0.11, 0.37, 0.81 y 0.89, respectivamente). La presión arterial (sistólica y diastólica) de los participantes no se modificó respecto de los valores basales luego del consumo de las barras en comparación con el grupo control (p = 0.83 y 0.79, respectivamente).

Discusión

En esta muestra de adultos con sobrepeso, el agregado diario de 2 barras con frutas y nueces a la dieta habitual no tuvo efectos en el peso corporal, la circunferencia de la cintura, el nivel de lípidos y la presión arterial, en tanto que la incorporación de 340 kcal diarias, provenientes de las barras, no indujo aumento de peso.

Los resultados respecto de los cambios en las mediciones antropométricas y en la presión arterial coinciden con los de estudios anteriores, que mostraron que el mayor consumo de frutas y nueces indujo cambios mínimos o nulos en estos parámetros.

Debido a que las barras están compuestas principalmente por nueces (50% de éstas y 30% de frutas) y debido a que estos alimentos son muy ricos en calorías, había una preocupación justificada respecto del aumento de peso luego del consumo de estos snacks y el consecuente incremento en el riesgo cardiovascular. Sin embargo, la ausencia de aumento de peso en los individuos de este estudio sugiere que hubo una compensación energética. Los mecanismos que podrían explicar los efectos del consumo de barras con frutas y nueces en el peso corporal se relacionan con la capacidad de las nueces de aumentar el gasto energético al mismo tiempo que proveen gran saciedad y una fuente de energía poco metabolizable. Es posible que este efecto de saciedad sea atenuado parcialmente por las frutas deshidratadas, dado que estas últimas tienen un alto umbral de saciedad. Aun así, los datos antropométricos obtenidos de este estudio sugieren que el impacto neto de las barras en la saciedad se mantiene favorable.

Este estudio también reveló que el consumo de barras con frutas y nueces no alteró la presión sistólica o diastólica respecto del grupo control. Los resultados de otros estudios epidemiológicos y clínicos apoyarían la hipótesis de que el consumo de frutas y vegetales tiene un impacto positivo en este parámetro; sin embargo, la ausencia de un cambio en la presión arterial en este trabajo podría estar relacionada con la falta de reducción en las medidas antropométricas.

Por último, este ensayo demostró que la introducción de una barra con frutas y nueces en la dieta habitual no resultó en un cambio significativo en el perfil de lípidos. Los ensayos previos, que investigaron el efecto modulador de las nueces sobre el perfil lipídico, mostraron resultados ambiguos: en algunos estudios no se observaron cambios y en otros se verificó una mejoría leve en el nivel de triglicéridos, CT y LDL. De todos modos, las diferencias metodológicas y la cantidad de nueces utilizadas en los estudios dificulta las comparaciones de los resultados.

El impacto acumulativo de todos los ingredientes en los componentes lipídicos séricos podría estar influenciado por los niveles variables de ácidos grasos (AG) saturados, AG monoinsaturados y AG poliinsaturados presentes en las nueces. Se ha demostrado que el impacto de los AG saturados en los niveles séricos de LDL, HDL, CT y en la relación entre CT y HDL es antagonista al impacto de los AG monoinsaturados y poliinsaturados. Asimismo, si bien los AG omega-3 disminuyen la presión arterial y el nivel de triglicéridos y aumentan la concentración de las HDL y las LDL, los AG omega-6 disminuyen los niveles de LDL. Las cantidades mínimas de AG omega-3 en las nueces de las barras, junto con la gran cantidad de azúcar, pudieron haber contribuido a los efectos neutrales observados en los niveles de triglicéridos y HDL. Asimismo, la posible disminución de las LDL inducida por el ácido linoleico presente en las barras pudo haber sido compensada por los efectos de los AG saturados y el azúcar. Así, señalan los autores, las recetas con más AG omega-3 y AG monoinsaturados y menos azúcares podrían mejorar el perfil lipídico.

Este trabajo tuvo algunas limitaciones: en primer lugar, la muestra del estudio fue pequeña. En segundo lugar, la mayoría de los participantes fueron personas blancas, lo que limita la generalización de los resultados respecto de otras razas. Además, no se les pidió a los participantes que dieran detalles respecto de sus patrones de alimentación. Sin embargo, debido a que ambos grupos siguieron una dieta a gusto, los resultados deberían aproximarse al contexto cotidiano.

Los investigadores concluyen que el consumo de 2 barras con frutas y nueces (con un total de 340 kcal) por 2 meses no indujo aumento de peso. Los snacks ricos en fibras podrían mejorar la calidad de la dieta sin aumentar el consumo energético total. Se necesitan más estudios para evaluar el efecto del consumo de colaciones en el peso corporal, con foco en los snacks que sacian el apetito, ricos en nutrientes.

Especialidad: Bibliografía - Clínica Médica