Bibliografía

Laboratorios Bagó > Bibliografías > La Amigdalectomía es Eficaz en los Niños con Disfagia e Hipertrofia Amigdalina

La Amigdalectomía es Eficaz en los Niños con Disfagia e Hipertrofia Amigdalina

  • AUTOR : Clayburgh D, Milczuk H, MacArthur C y colaboradores
  • TITULO ORIGINAL : Efficacy of Tonsillectomy for Pediatric Patients with Dysphagia and Tonsillar Hypertrophy
  • CITA: Archives of Otolaryngology-Head & Neck Surgery 137(12):1197-1202, Dic 2011
  • MICRO : La disfagia atribuible a hipertrofia amigdalina es un síntoma habitual no sólo en los pacientes que presentan esencialmente trastornos de la deglución sino también en aquellos con otras manifestaciones clínicas, por ejemplo, apnea obstructiva del sueño; en cualquiera de estos casos, la disfagia mejora significativamente luego de la amigdalectomía.

Introducción

El proceso de la deglución incluye las fases bucal, orofaríngea y esofágica. El trastorno de una o más de estas fases es causa de disfagia. En los niños, las causas más comunes de disfagia incluyen las alteraciones craneofaciales, los trastornos motores que afectan la cavidad bucal, la parálisis cerebral, la distonía muscular, la hipertrofia amigdalina y las estrecheces esofágicas. La hipertrofia amigdalina sería causa de disfagia al evitar el correcto pasaje del alimento por la orofaringe; en estos casos, la amigdalectomía puede estar indicada.

En la población pediátrica de los EE.UU., señalan los autores, la tonsilectomía es la segunda intervención quirúrgica más frecuente. Además de la disfagia, los trastornos de la respiración asociados con el sueño, la apnea obstructiva del sueño, la amigdalitis recurrente, los abscesos periamigdalinos, el sangrado recurrente y la sospecha de un proceso maligno son otras de las indicaciones para la cirugía. La halitosis, la disartria, la disfagia y los síndromes febriles periódicos con aftas recurrentes, faringitis e inflamación ganglionar, en cambio, motivan la cirugía con mucha menos frecuencia. A diferencia de los pacientes con apnea obstructiva del sueño o con amigdalitis recurrente, en quienes la indicación de amigdalectomía es ampliamente aceptada, la intervención en los individuos con disfagia es tema de debate. De hecho, la mayoría de los estudios al respecto abarcó niños con trastornos neurológicos.

La finalidad de los autores de la presente investigación prospectiva fue evaluar los efectos de la amigdalectomía sobre los síntomas objetivos y subjetivos de la disfagia.

Pacientes y métodos

Fueron estudiados pacientes de 1 a 18 años sometidos a amigdalectomía. Se evaluaron dos cohortes: la primera incluyó niños con disfagia orofaríngea determinada por radiografía o mediante estudio de fonoaudiología, posiblemente vinculada con hipertrofia amigdalina (grupo con disfagia), en tanto que la segunda población estuvo integrada por pacientes sometidos a amigdalectomía por otras indicaciones, especialmente apnea obstructiva del sueño y amigdalitis crónica (grupo control). Se excluyeron los pacientes con trastornos neurológicos.

Se utilizó la versión adaptada para niños del Swallowing Quality of Life (SWAL-QOL), que permitió conocer los síntomas y la calidad de vida asociada con la disfagia. Este cuestionario de 11 dominios, que valoran 44 manifestaciones en total, fue completado por los padres en la visita basal, el día de la cirugía, a los 30 días de la intervención y a los 4 y 6 meses después del procedimiento. Cada una de las secciones se valoró con escalas de Likert de 0 a 100 puntos, puntajes que reflejan un estado menos favorable y más favorable, respectivamente. Se tuvo en cuenta el peso en relación con la edad con los estándares de 2000 de los Centers for Disease Control and Prevention para los niños de 2 años o más y de 2006 de la Organización Mundial de la Salud para los participantes de menos de 2 años. Los puntajes del SWAL-QOL previos a la cirugía y posteriores a ella se compararon con pruebas de la t. Mediante modelos de regresión lineal se valoraron los cambios del peso posteriores a la intervención respecto de las modificaciones en los puntajes del SWAL-QOL.

Resultados

La muestra de análisis abarcó 57 pacientes de 2 a 14 años, sometidos a tonsilectomía. En comparación con el grupo control, los pacientes del grupo con disfagia fueron de menor edad y con mayor frecuencia fueron de sexo femenino.

Al mes de la cirugía, la cohorte con disfagia (n = 18) presentó mejoras significativas en todos los dominios del SWAL-QOL (58.4 puntos antes de la intervención y 82.4 puntos, en promedio, luego de la cirugía; p < 0.001), beneficios que se mantuvieron en la valoración de los 6 meses. Si bien antes de la amigdalectomía, los puntajes del SWAL-QOL en el grupo control (n = 39) fueron más altos en comparación con los del grupo con disfagia (p < 0.001), se comprobaron mejoras significativas al mes de la intervención en todos los dominios de esta herramienta, que persistieron hasta los 6 meses de evaluación. Aunque la disfagia no fue la indicación principal para la tonsilectomía en el grupo control, estos pacientes presentaron puntajes alterados en el SWAL-QOL antes de la cirugía, un fenómeno que sugiere que muchos de estos casos presentaban disfagia además del diagnóstico primario. Los valores se modificaron significativamente luego de la intervención (80.8 puntos a 91.7 puntos en promedio, respectivamente; p < 0.001).

La mayoría de los niños del grupo con disfagia no toleraba la dieta regular y requería alimentos blandos; no obstante, al mes de la intervención se registró una mejora significativa en esta manifestación (33.3% antes de la cirugía y 60% después de ésta; p = 0.01). Los pacientes del grupo control también recuperaron la tolerancia para una dieta regular (81.1% antes de la cirugía en comparación con 94.4% luego de ésta; p = 0.04).

En el grupo con disfagia se observó un aumento significativo del peso según la edad, luego de la cirugía (p = 0.01). En el grupo control, el aumento del peso fue menor, pero aún significativo (p = 0.003). También se constató una correlación positiva entre los cambios en los puntajes del SWAL-QOL y las modificaciones del peso según la edad (R2 = 0.27).

Discusión

La disfagia es un síntoma frecuente en los niños. Si bien el trastorno obedece a múltiples factores, la obstrucción mecánica secundaria a la hipertrofia amigdalina es una causa muy frecuente. En estos pacientes, la amigdalectomía parece particularmente útil; sin embargo, señalan los autores, sólo unos pocos trabajos evaluaron el efecto de la cirugía en la evolución de la disfagia. Los hallazgos del presente estudio confirmaron que la amigdalectomía es eficaz en estos pacientes. En un estudio anterior de Suecia, que abarcó 122 niños, los trastornos de la deglución desaparecieron en casi la totalidad de los pacientes sometidos a cirugía. La intervención también parece útil en los niños con alteraciones neurológicas. Una investigación reveló que la amigdalectomía mejora la disfagia asociada con trastornos de la motilidad orofaríngea; efecto favorable que fue confirmado en otro trabajo con estudios videofluoroscópicos de la deglución. Aun así, señalan los expertos, los resultados son difíciles de extrapolar a la población pediátrica en general.

En el presente estudio, la disfagia mejoró en los dos grupos de pacientes, a juzgar por los resultados del SWAL-QOL, por la capacidad para tolerar una dieta regular y por el aumento del peso posterior a la intervención. La evolución es esperable en los niños, en quienes el síntoma es especialmente atribuible a la hipertrofia amigdalina. Sin embargo, la evolución favorable en los pacientes del grupo control sugiere que la intervención también es eficaz en aquellos niños en quienes la disfagia no es el síntoma primario. Aunque se comprobó una mejoría importante en los dos grupos, la correlación entre el cuestionario de calidad de vida y el aumento de peso fue débil. En concordancia, algunos trabajos anteriores sugirieron poca correlación entre las mediciones subjetivas y objetivas de la deglución. En este sentido, añaden los autores, es posible que otros factores participen en el aumento de peso.

El escaso número de pacientes, evaluados además en un centro académico terciario, complica la generalización de los hallazgos a otras poblaciones, por ejemplo, a pacientes sometidos a cirugía por amigdalitis recurrente. Por su parte, el SWAL-QOL ha sido validado en la población adulta pero no en la pediátrica.

En conclusión, el presente trabajo demostró por primera vez que la amigdalectomía es una intervención eficaz en los niños con disfagia secundaria a hipertrofia amigdalina. La cirugía se asoció con beneficios en los pacientes en quienes la disfagia fue el síntoma principal, así como en aquellos con otros trastornos asociados con la hipertrofia de las amígdalas. Los estudios futuros serán de gran ayuda para determinar cuáles son los pacientes con mayor probabilidad de mejorar con la cirugía, señalan por último los expertos.

Ref : OTORRINO.

Especialidad: Bibliografía - Otorrinolaringología

ADVERTENCIA:

El material incluido en este sitio ha sido concebido exclusivamente para los profesionales de la salud con fines informativos, y destinado a orientar sobre el uso adecuado de los medicamentos y a satisfacer sus necesidades de mayor información.

Todos los textos referidos a nuestros productos de venta bajo prescripción médica se corresponden a los lineamientos aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).

Laboratorios Bagó le sugiere consultar siempre a un profesional de la salud calificado ante cualquier duda sobre una condición médica particular.

He comprendido y deseo ver la información

Consultas médicas: infoproducto@bago.com.ar