Laboratorios Bagó > Bibliografías > Utilidad de la Toracocentesis en el Derrame Pleural de Etiología Tuberculosa
Utilidad de la Toracocentesis en el Derrame Pleural de Etiología Tuberculosa
- AUTOR : Bhuniya S, Arunabha D, Mita S y colaboradores
- TITULO ORIGINAL : Role of Therapeutic Thoracentesis in Tuberculous Pleural Effusion
- CITA : Annals of Thoracic Medicine 7(4):215-219, Oct 2012
- Esencia: En el presente estudio se comparó la eficacia de la toracocentesis terapéutica con la efectuada con fines de diagnóstico para el tratamiento del derrame pleural por Mycobacterium tuberculosis.
Introducción
Los síntomas del derrame pleural incluyen disnea, dolor torácico y tos, que se intensifica con el esfuerzo y que, muchas veces, interfiere con las actividades diarias. La toracocentesis alivia la disnea y mejora la mecánica ventilatoria, permitiéndoles a los pacientes retomar sus actividades de rutina.
El presente trabajo fue realizado en India, donde la causa más frecuente de derrame pleural es la tuberculosis, y tuvo como objetivo estudiar el grado de dificultad ventilatoria inicial y los cambios una vez instaurada la terapia antibiótica y realizada la toracocentesis. También abordó las posibles secuelas luego de 6 meses de tratamiento.
Métodos
El estudio clínico se llevó a cabo entre noviembre de 2007 y octubre de 2009 y tuvo un diseño abierto y aleatorizado. Se seleccionaron pacientes con derrame pleural unilateral que ocupara más de la mitad del hemitórax, con indicación de toracocentesis y diagnóstico de tuberculosis, efectuado mediante biopsia o examen del líquido pleural. En total fueron estudiados 52 pacientes, que luego fueron divididos en dos grupos. En el grupo A se realizó toracocentesis terapéutica máxima y el grupo B fue sometido sólo a toracocentesis diagnóstica. Ambos grupos recibieron tratamiento antituberculoso. El seguimiento se efectuó al primero, segundo y sexto mes y consistió en radiografías y ecografía de tórax y espirometría. El nivel de líquido pleural en la radiografía permitió clasificar el derrame en mínimo, moderado o masivo.
Resultados
Ambos grupos fueron similares desde el punto de vista demográfico. Inicialmente, el derrame pleural se redujo en todos los participantes. Al mes de iniciado el tratamiento antibiótico, el 61.54% de los pacientes del grupo A presentó derrame pleural mínimo y ninguno moderado o masivo, mientras que en el grupo B un 15.38% tuvo derrame moderado y un 84.62%, derrame mínimo. A los 2 meses, todos los pacientes del grupo B y sólo un 26.93% del grupo A presentaron derrame pleural mínimo. A los 6 meses, ningún paciente del grupo A y sólo 5 sujetos del grupo B tenían derrame pleural.
Una vez efectuada la toracocentesis en todos los participantes se observó en la espirometría el incremento en la capacidad vital forzada (CVF) y en el volumen espiratorio forzado en el primer segundo (VEF1). A los 6 meses, el VEF1 fue significativamente mayor en los pacientes del grupo A (87.62 contra 84.92); lo mismo se observó respecto de la CVF (86.46 contra 83.31). Sin embargo, en ningún sujeto se observó la modificación sustancial de la relación VEF1/CVF inicial. En todos los pacientes se detectó engrosamiento de la pleura, que no estaba presente en el momento inicial, en el estudio ecocardiográfico con Doppler color, aunque en menor proporción en el grupo A.
Discusión
El derrame pleural tuberculoso representa el segundo lugar en frecuencia de infección tuberculosa extrapulmonar. A pesar de que no se midió objetivamente el grado de disnea de los pacientes estudiados, en el momento inicial y al final del estudio, los autores afirman que la mejoría clínica de los sujetos sometidos a drenaje del líquido pleural fue significativa. Así, los investigadores afirman que los pacientes en los que se practicó una toracocentesis terapéutica tuvieron cambios espirométricos más favorables que aquellos asignados a la toracocentesis diagnóstica; no obstante, aclaran que la mejoría se registró en las primeras 24 horas posteriores a la toracocentesis.
El engrosamiento pleural residual fue mayor en el grupo B, debido a que la toracocentesis terapéutica permite una mayor eliminación del exudado inflamatorio, lo que conduce a la menor formación de fibrina.
Entre las limitaciones del estudio los expertos mencionan la variabilidad entre observadores que pudo haberse registrado al momento de valorar el grado de engrosamiento pleural, la falta de control de esta secuela más allá de los 6 meses y la falta de un método objetivo de valoración de la disnea.
Los autores concluyen que la toracocentesis debe efectuarse juntamente con la administración del tratamiento antifímico con el fin de aliviar la disnea, acelerar la recuperación de la capacidad pulmonar y minimizar el riesgo de engrosamiento pleural residual.
Ref : INFECTO, CIRUG, NEUMO.
Especialidad: Bibliografía - Cirugía - Infectología - Neumonología