Asociación entre la Violencia de Género y el Aborto

• TITULO : Asociación entre la Violencia de Género y el Aborto
• AUTOR : Colarossi L, Dean G
• TITULO ORIGINAL : Partner Violence and Abortion Characteristics
• CITA : Women & Health 54(1-4): 177-193, Ene 2014
• MICRO : La violencia de género se asocia con el riesgo de aborto. En consecuencia, es fundamental que los profesionales de la salud cuenten con heramientas que otorguen independencia y poder de decision a la mujer en cuanto al uso de anticonceptivos y el cuidado de su salud reproductiva.

Introducción y Objetivos

La violencia de género afecta la salud sexual y reproductiva al asociarse con una disminución del uso de métodos anticonceptivos y con un aumento de la frecuencia de enfermedades, de embarazos no deseados y complicados y de abortos. De hecho, la finalización del embarazo es más probable en mujeres con relaciones de pareja conflictivas, aunque se desconoce la asociación entre la violencia de género y las características del aborto.

En la actualidad se proponen diferentes modelos mediante los cuales la violencia de género influye sobre la salud reproductiva y el aborto. Esto se vincula con el control reproductivo ejercido por la pareja, de manera que la mujer se ve limitada a la hora de tomar decisiones independientes sobre su reproducción. Las consecuencias de esta falta de control pueden ser económicas, emocionales y físicas. Según lo estimado, la violencia de género tiene lugar en hasta el 40% de las mujeres que desean abortar.

El presente estudio se llevó a cabo con el objetivo de comparar las características del embarazo y el aborto entre las mujeres que refieren violencia de género y las mujeres que no refieren dicho tipo de violencia.

Pacientes y Métodos

El estudio fue de cohortes y retrospectivo y se llevó a cabo mediante el análisis de las historias clínicas de las mujeres que recibieron atención relacionada con la planificación familiar o el aborto en diferentes centros de salud reproductiva ubicados en Nueva York. Los autores seleccionaron 6564 historias clínicas correspondientes a mujeres que refirieron violencia de género y la misma cantidad de historias clínicas correspondientes a mujeres que no refirieron ese tipo de violencia. Se prestó atención a la información sobre el antecedente de violencia de género y abortos. Con el fin de disminuir el lapso de tiempo entre la violencia de género y los abortos, los autores analizaron los datos sobre las pacientes que habían recibido atención reciente debido al aborto de un feto de 4 a 24 semanas de gestación.

La información demográfica de interés incluyó la edad, la edad de inicio de las relaciones sexuales, el origen étnico y el tipo de cobertura médica. La violencia de género fue evaluada según la información aportada por las pacientes ante la realización de preguntas concretas al respecto. También se analizaron los problemas con el uso de métodos anticonceptivos, los antecedentes obstétricos y las características de los abortos. La información fue analizada según la asociación bivariada entre la violencia de género, las características demográficas, los años de actividad sexual, los problemas con el uso de anticonceptivos, la evolución obstétrica y las características de los abortos. En segundo lugar se aplicaron modelos de regresión logística para analizar el riesgo de aborto según el antecedente de violencia y las características de las pacientes.

Resultados

La muestra evaluada incluyó pacientes de 14 a 60 años, en su mayoría de origen afroamericano. De las mujeres que refirieron violencia de género, el 33% manifestó haberla sufrido durante el último año. La violencia de género fue más frecuente en el grupo de mujeres de mayor edad, afroamericanas, beneficiarias del seguro médico estatal para personas de bajos ingresos. Además, la probabilidad de uso problemático de anticonceptivos y el antecedente de dos o más abortos fueron más elevados entre las mujeres que refirieron situaciones de violencia de género. Las mujeres que manifestaron sufrir situaciones de violencia en el momento de la entrevista tuvieron más probabilidades de abortar fetos de 19 a 24 semanas.

El mayor número de partos se asoció con un aumento de la probabilidad de aborto espontáneo y provocado. Dicho cuadro fue menos frecuente entre las mujeres caucásicas en comparación con las de otros orígenes étnicos. Al considerar el tipo de cobertura médica, no se observó una asociación entre la violencia de género y el antecedente de abortos. No obstante, las mujeres con antecedentes de violencia en algún momento de sus vidas presentaron un riesgo mayor de aborto.

La evaluación de las mujeres que habían abortado en forma reciente indicó que el 90% tenían embarazos de hasta 12 semanas. La probabilidad de aborto fue algo mayor entre las mujeres más jóvenes beneficiarias del seguro médico estatal o que habían abonado sus consultas médicas al considerar la edad gestacional, de 13 a 18 y de 19 a 24 semanas. No se halló una asociación entre la edad gestacional en el momento del aborto y otras variables como el origen étnico, la cantidad de partos o la cantidad de años de actividad sexual. No obstante, al tener en cuenta las variables demográficas se observó una asociación entre la violencia de género y la probabilidad mayor de abortar entre las semanas 19 y 24. Finalmente, entre las pacientes que abortaron durante el primer trimestre de embarazo, aquellas de menor edad y mayor número de partos presentaron una probabilidad algo superior de escoger métodos quirúrgicos para abortar.

Discusión

En coincidencia con lo hallado en estudios anteriores, los autores observaron una asociación entre la violencia de género y el aborto espontáneo o provocado. Si bien la violencia no se asoció con el antecedente de aborto o el momento de finalización del embarazo durante el primer trimestre, aumentó el riesgo de reiteración de los abortos espontáneos y provocados. Es necesario contar con más información acerca de los mecanismos responsables de la influencia de la pareja sobre la decisión de la mujer de finalizar el embarazo. También debería contarse con más información sobre las estrategias empleadas por las mujeres para cuidar su salud en dicho contexto.

De acuerdo con la información disponible a nivel nacional, el 18% de los embarazos son finalizados en forma electiva y el 44% de las mujeres que abortan tienen antecedentes de al menos un aborto adicional. La mayoría de los abortos tienen lugar durante el primer trimestre de embarazo, en tanto que el 8.5% de los abortos suceden en el segundo trimestre. Esto incrementa el riesgo para las mujeres, al igual que los abortos reiterados. Hasta el momento no se cuenta con información que permita conocer los factores que favorecen la reiteración de los abortos.

Los resultados obtenidos permiten indicar la necesidad de contar una evaluación sistemática de la violencia de género y con formación especializada para el manejo de dicha situación por parte de los profesionales de la salud. Esto podría mejorar el estado de salud reproductiva de la mujer. Asimismo, sería beneficioso contar con protocolos de seguimiento que incluyan el asesoramiento de las pacientes acerca de la salud sexual y reproductiva y la utilización de servicios específicos para el abordaje de la violencia doméstica.

Entre las limitaciones del presente estudio, los autores mencionan el uso de información secundaria obtenida de las historias clínicas de las pacientes. Dicha información no fue recabada para realizar el presente estudio, con lo cual resulta insuficiente en lo vinculado con cuestiones como la conducta violenta específica ejercida contra la mujer. Tampoco se contó con información sobre el origen del aborto y la motivación de las pacientes para realizarlo. Es posible que la información brindada por las pacientes haya sido sesgada, lo cual aumenta el nivel de imprecisión de los resultados.

Conclusión

Existe una relación entre el control reproductivo ejercido por la pareja de la mujer y la salud reproductiva vinculada con el aborto. Es necesario contar con herramientas de detección sistemática de la violencia de género aplicables en entornos vinculados con la salud reproductiva. Asimismo, debería contarse con protocolos de asesoramiento y seguimiento sobre el uso de anticonceptivos que permitan a la mujer tener control y tomar decisiones sobre su salud reproductiva.

Especialidad: Bibliografía - Clínica Médica - Ginecología