Describen las Propiedades Anticancerígenas de Ciertos Aceites Esenciales

• AUTOR : Timsina B, Shukla M, Nadumame V
• TITULO ORIGINAL : A Review of Few Essential Oils and Their Anticancer Property
• CITA : Journal of Natural Pharmaceuticals 3(1):1-8, Ene 2012
• MICRO : Realizan una revisión de los estudios recientemente publicados sobre el papel de ciertos aceites esenciales como adyuvantes en el tratamiento quimioterapéutico.

Introducción

Más de tres cuartas partes de la población mundial basa el cuidado de su salud en el uso de hierbas medicinales y productos naturales. En la India, las drogas de origen natural se han utilizado durante siglos en prácticas curativas como el ayurveda y el unani. Incluso la medicina alopática ha incluido ciertos derivados de plantas en su farmacopea.

Las propiedades de ciertas plantas aromáticas se atribuyen a sus fracciones oleosas volátiles, conocidas como aceites esenciales. Numerosos investigadores han evaluado la actividad antineoplásica de estos compuestos, y han observado que su mecanismo de acción es diferente del de los agentes quimioterapéuticos tradicionales.

Los agentes volátiles o esenciales son compuestos lipofílicos aromáticos, constituidos por hidrocarburos monoterpénicos y sesquiterpénicos.

Propiedades antineoplásicas de algunos aceites esenciales

Aceite de oliva

Forma parte de la denominada «dieta mediterránea», originaria de los países que rodean el mar Mediterráneo, en los que se observó una menor incidencia de enfermedades crónicas degenerativas. El aceite de oliva, utilizado para freír, tiene propiedades protectoras contra el carcinoma colorrectal, por la menor producción de aminas heterocíclicas carcinogénicas. Estudios in vitro demostraron que los fenoles de este aceite disminuyen el daño sobre el ADN, aumentan las barreras de protección y disminuyen la invasión celular en los tejidos adyacentes.

Otros estudios, observaron que un consumo de aceite de oliva de por lo menos a 30.5 g/día, disminuye la incidencia de alta densidad mamaria en las mamografías. También se ha observado una relación inversa entre el consumo de este aceite y la incidencia y mortalidad por carcinoma de próstata. Numerosos estudios, tanto in vitro como in vivo, encontraron que el aceite de oliva disminuye la expresión de Bcl-2 y ciclooxigenasa 2 en las neoplasias colorrectales.

Los fenoles serían los responsables de los efectos beneficiosos de estos agentes, y se encuentran en una concentración de 196 a 500 mg/kg.

Aceite de palma

Este aceite ha formado parte de la dieta humana por cinco mil años. Es rico en vitaminas, antioxidantes y otros fitonutrientes. Su coloración rojiza se debe al alto contenido de betacarotenos y licopeno. Representa la mayor fuente natural de provitamina A y de tocotrienol, la forma más potente de la vitamina E, que ha demostrado tener actividad contra las células neoplásicas prostáticas. También inhibe el crecimiento de tumores de piel, estómago, páncreas, hígado, pulmón, colon y mama. No sólo bloquea el crecimiento tumoral, sino que además tiene la capacidad de inducir la apoptosis.

El componente principal del aceite de palma son los triacilgliceroles. También está compuesto de esteroles, alcoholes triterpénicos, tocoferoles, fosfolípidos, clorofila, carotenoides, aldehídos y cetonas.

Aceite de coco

Es un aceite comestible con un alto contenido de grasas saturadas. En 1987 se publicó una revisión que demostró su efecto protector contra los cánceres de colon y de mama. Se cree que sus propiedades antineoplásicas se deben al ácido butírico. También tiene la capacidad de disminuir el colesterol, por su efecto estimulante sobre la glándula tiroides.

Contiene una alta proporción de ácidos grasos de cadena liviana, pero está formado principalmente por triglicéridos de cadena mediana, los cuales son fácilmente digeridos, constituyendo una fuente rápida de energía, necesaria para promover la cicatrización. También posee tocoferoles y fitoesteroles, en menor proporción.

Aceite de clavo

Es un aceite derivado de la planta de clavo. Su componente activo es el eugenol, el cual se usa en odontología como analgésico. También presenta acción antibacteriana.

Demostró tener actividad antiproliferativa sobre líneas celulares de carcinoma de colon, por inducción de la apoptosis y generación de especies reactivas del oxígeno.

Aceite de soja

Se extrae de los porotos de soja. Su mayor componente son los triglicéridos. Varios de sus otros componentes tienen actividad anticancerígena, como las isoflavonas, inhibidores de proteasa, fitoesteroles, saponinas, ácidos fenólicos y fitatos. Contiene tres clases de isoflavonas: genisteína, daiceína y gliceteína. La genisteína es un inhibidor específico de la proteína tirosina quinasa, aumenta las concentraciones de factor de crecimiento transformante beta, que inhibe el crecimiento de las células neoplásicas y tiene propiedades antoangiogénicas, in vitro. Estudios previos han demostrado que el consumo de aceite de soja previene el cáncer de mama.

La genisteína disminuye la síntesis de ADN en células humanas prostáticas, y disminuye el efecto de la testosterona en el cáncer de próstata, en ratas. Las isoflavonas inhiben la 5-alfa-reductasa que convierte la testosterona en dihidrotestosterona.

Existe evidencia epidemiológica de que los productos derivados de la soja disminuyen la incidencia de cáncer de colon. Las saponinas de la soja son hepatoprotectoras, hipolipemiantes, antineoplásicas y antioxidantes, entre otras propiedades.

Los porotos de soja son una mejor fuente de vitamina B que los cereales y contienen tocoferoles, que son antioxidantes naturales. También son la fuente natural más abundante de las mencionadas isoflavonas.

Aceite de hinojo

Deriva de las semillas de hinojo y sus propiedades medicinales se deben a varios de sus componentes, entre los cuales se encuentran el alfa-pineno, el aldehído anísico, cineol, fenchol, limoneno, mirceno, metilchavicol y transanetol.

El extracto metanólico de las semillas de hinojo tiene actividad antitumoral y citotóxica, y potencial efecto contra líneas celulares de cáncer de mama y de hígado.

Estudios realizados en ratones con tumor ascítico de Ehrlich demostraron que el anetol incrementa el tiempo de supervivencia y disminuye el peso y el volumen tumoral. Además, es una poderosa fuente natural de antioxidantes tales como las vitaminas E y C, los compuestos fenólicos y las oleorresinas.

Conclusiones

Se estima que más del 80% de la población mundial no tiene acceso a los fármacos modernos. Las terapias antineoplásicas actuales presentan un alto nivel de toxicidad, que hace que en la mayoría de los casos no sea tolerada.

Los autores de la presente revisión consideran que los agentes naturales utilizados en la medicina ayurvédica son eficaces no sólo para prevenir, sino también para tratar ciertos tipos de cáncer. Su perfil de seguridad hace que puedan utilizarse tanto solos como junto con otros agentes quimioterapéuticos, con el fin de potenciar su eficacia y disminuir su toxicidad.

Ref : NUTRI.

Especialidad: Bibliografía - Nutrición