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Detección del Cáncer Colorrectal mediante la Evaluación de la Sangre Oculta en Materia Fecal
- AUTOR:Tifratene K, Eisinger F, Seitz J
- TITULO ORIGINAL: Colorectal Cancer Screening Program: Cost Effectiveness of Systematic Recall Letters
- CITA: Gastroentérologie Clinique et Biologique 31(11):929-933, Nov 2007
- MICRO: Tanto el envío sistemático de equipos para evaluar la sangre oculta en materia fecal como los recordatorios de consulta al médico para realizar dicho estudio demostraron ser eficaces para la detección temprana del cáncer colorrectal.
Introducción
El cáncer colorrectal (CCR) es la segunda causa de muerte por cáncer en Francia. El control con la búsqueda de sangre oculta en materia fecal (SOMF) ha disminuido la mortalidad en un 15% a 18%, aunque esta reducción depende del nivel de participación en las campañas de evaluación. En 2001, el gobierno francés, a través de su Ministerio de Salud, inició un programa piloto de evaluación para CCR en todas las personas entre 50 y 74 años.
De acuerdo con los objetivos programados por el comité nacional de evaluación del CCR y por las experiencias previas en Francia, se implementó una estrategia mixta para la entrega de los equipos para los exámenes: durante la «fase médica», los médicos generalistas distribuyeron el equipo de evaluación; luego, durante la «fase postal», los equipos fueron enviados por correo a todos aquellos pacientes que no respondieron durante la primera fase. Con la aplicación de estas dos fases se esperaba un porcentaje de participación mayor del 50%, y ésta fue del 41% y 51.3% durante la primera y la segunda fase, respectivamente. La segunda fase resultó ser costosa y, debido a esto, se consideraron otras estrategias para los sujetos que no respondieron: la primera fue el envío del equipo de evaluación por correo; la segunda, se basó en cartas recordatorias enviadas por correo junto con un cupón para obtener un equipo de evaluación en forma gratuita. Esta fue la estrategia evaluada.
En el presente estudio, los investigadores compararon ambas estrategias para determinar su eficacia y costo, para poder calcular el aumento del porcentaje del costo-beneficio.
Materiales y métodos
Este trabajo se basó en la primera campaña de detección de CCR llevada a cabo en Bouches-du-Rhône, a partir de noviembre de 2002. El objetivo fue una población de entre 50 y 74 años con riesgo moderado de presentar CCR. Todos los pacientes de este grupo de edad recibieron una carta, que los invitaba a dirigirse a una consulta con su médico de cabecera. Luego del examen físico, el médico entregó el equipo de evaluación de SOMF. Junto con la carta se incluyó un cupón en el que el paciente podía rechazar la invitación a pertenecer al estudio por diversos motivos. Si no se obtenía respuesta, en los siguientes 3 meses se enviaba una carta recordatoria, aconsejando al paciente a concurrir al médico, que entregaría el equipo de evaluación. Después de esta fase médica, se envió por correo el equipo al domicilio de todos los pacientes que no respondieron luego de los 6 meses posteriores a la primera invitación. En cualquiera de las fases, que fueron gratuitas, el paciente podía negarse a la realización sin deber especificar una razón.
La eficacia se determinó por la cantidad de análisis realizados en cada grupo. El incremento del costo-beneficio fue el costo extra de una estrategia sobre la otra para lograr una unidad de eficacia.
Resultados
Del total de 10 930 habitantes del décimo distrito de Marsella invitados a participar del estudio, sólo 2 283 (20.9%) lo realizaron durante la fase médica de la campaña, 393 (3.6%) de los equipos no llegaron a destino y 1 238 (11.38%) fueron excluidos. El porcentaje de participación entre la población elegida fue del 24.5%. Al final de la fase médica, 7 016 sujetos de 10 930 no respondieron a la primera consulta o no reenviaron el cupón de respuesta y fueron reasignados a uno de los dos grupos estratégicos de la segunda fase: 3 508 fueron asignados a la estrategia convencional, en la que el equipo se envió por correo sistemáticamente, y 3 507 a la estrategia experimental selectiva de correo.
La media de edad fue de 61.3 años en el grupo de la estrategia convencional y de 61.2 años en el grupo experimental. El 54.5% y el 54.6% del primer y segundo grupo, respectivamente, eran mujeres.
Luego de que se completaron todos los envíos por correo murieron 12 personas (4 en el grupo de la estrategia convencional y 8 en el grupo experimental) y 94 no residían en la dirección indicada (54 y 43, respectivamente); por lo tanto, durante la segunda fase se enviaron en forma satisfactoria 3 450 equipos en el primer grupo y 3 457 recordatorios en el grupo experimental.
Del total de la población estudiada, 498 sujetos indicaron su negativa a realizar el examen en el cupón de repuesta, 221 (6.4%) en el grupo de la estrategia convencional y 277 (8%) en el grupo experimental. Se distinguieron dos respuestas entre el total de los cupones recibidos: la exclusión temporal de la campaña de detección y la exclusión definitiva, que correspondió a los pacientes con riesgo elevado de CCR. La exclusión médica fue más frecuente en el grupo experimental (5.9% vs. 3.9%). Todos los sujetos en los que se indicó la exclusión definitiva fueron más jóvenes en el grupo experimental (62.1 vs. 65 años).
Se enviaron por correo 3 508 equipos en el grupo de la estrategia convencional y 389 (11.1%) en el grupo experimental, según fueron solicitados por los pacientes. Un total de 489 individuos del primer grupo realizaron el examen, mientras que en el grupo experimental lo efectuaron 271. La proporción entre la cantidad de exámenes realizados sobre el total de equipos enviados, expresada en un porcentaje de realización, fue del 13.9% en el grupo de la estrategia convencional y del 69.7% en el grupo experimental.
No se hallaron diferencias entre ambos grupos con respecto a la edad y el sexo de los pacientes que realizaron los estudios (61 años y 56.6% de mujeres en el primer grupo y 60.1 años y 57.57% de mujeres en el segundo).
Al tener en cuenta la adhesión de los sujetos durante la fase médica, el porcentaje general de participación de la población elegida para la detección de SOMF fue de 36.6% con la estrategia convencional de envío por correo sistematizado de los equipos y de 32.1% en el grupo experimental de estrategia selectiva de correo.
El costo total de la operación fue de 16 424 y 5 013 euros en el primer y en el segundo grupo, respectivamente (11 411 euros más económico). El costo de cada equipo de evaluación fue de 33.59 euros en el grupo de la estrategia convencional y de 18.50 euros en el grupo experimental. El envío sistematizado por correo resultó ser más eficaz pero también más costoso que el recordatorio dirigido. Los autores señalan que si se toman en cuenta todas las personas excluidas por razones médicas del análisis de costo-beneficio, el costo en la realización del estudio disminuye de 52.34 euros a 51.24 euros por cada evaluación adicional.
Discusión
Con base en los resultados de un estudio francés, el costo en la prevención del CCR necesita un plan de detección organizado, que tendrá un costo elevado durante el primer año de realización. Según los investigadores, el costo relacionado con el tratamiento del CCR deber disminuir con los años; sin embargo, el aumento en los costos debe verificarse durante la fase de detección y prevención. De acuerdo con los resultados del presente estudio, y en el contexto en el cual se encuentra Francia, que se ha abocado intensamente a la detección sistemática de esta neoplasia, es de gran importancia estudiar las estrategias nacionales con una fase sistemática de envío por correo de los equipos y compararla con un método de recordatorio selectivo, también por correspondencia.
Los autores destacan que la aplicación de una u otra estrategia se dirige hacia diferentes respuestas. En el grupo experimental de la estrategia selectiva es necesaria la respuesta por parte del paciente que solicita el equipo para realizar el estudio, lo que llevaría a un menor número de personas que realizan el examen porque requiere de un paso más de su parte, en comparación con el grupo de la estrategia convencional (271 vs. 489 pacientes). Desde un punto de vista más pragmático, el grupo experimental fue mucho más selectivo, ya que el estudio se realizó con el 69.7% de los equipos enviados, a diferencia del 13.9% en el grupo de la estrategia convencional. Otra observación a tener en cuenta, señalan, es la cantidad de sujetos del grupo experimental que no participaron por razones médicas (204 vs. 135 en el grupo de la estrategia convencional).
Durante la fase postal, la participación fue 6.4% mayor en el grupo experimental con respecto al grupo de la estrategia convencional, en la que también pudo observarse un ahorro de 26.16 euros por cada equipo de evaluación. En el período comprendido entre 2002 y 2004 se enviaron 311 324 equipos a todas las personas que no respondieron en la fase médica. Del total enviado, se diagnosticaron 137 tumores, entre los que se incluyeron 52 cánceres que no se hubiesen detectado si se hubiera utilizado la estrategia experimental. Los resultados de este estudio deben ser analizados como una investigación con intención curativa, que debe dirigirse a una interpretación mucho más pragmática que explicativa.
Especialidad: Bibliografía - Clínica Médica - Oncología