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El Sueño es un Proceso de Naturaleza Diádica
- AUTOR: Troxel WM, Robles TF, Hall M, Buysee DJ
- TITULO ORIGINAL: Marital Quality and the Marital Bed: Examining the Covariation between Relationship Quality and Sleep
- CITA : Sleep Medicine Reviews 11(5):389-404, Oct 2007
- MICRO: El reconocimiento de la naturaleza diádica del sueño puede permitir el descubrimiento de los mecanismos involucrados en la etiología y el mantenimiento de los trastornos del sueño y de los problemas de pareja.
Introducción y objetivos
El sueño es un estado fisiológico vulnerable. En condiciones óptimas, se relaciona con un sentimiento de seguridad que permite la disminución del estado de vigilancia y alerta. Este sentimiento de seguridad deriva en gran medida del ambiente social. Los trastornos del sueño afectan la capacidad de regular las emociones y la conducta en situaciones interpersonales. Es decir, existiría una relación bidireccional entre el sueño y el entorno social. La relación marital es el contexto social primario para la mayoría de los adultos; en consecuencia, el matrimonio tendría un efecto importante sobre el sueño. Por ejemplo, se informó que el estrés relacionado con un proceso de divorcio disminuye la cantidad de sueño reparador.
A pesar de que para la mayoría de los adultos el sueño tiene una naturaleza diádica, los estudios sobre la influencia de las relaciones íntimas sobre la calidad del sueño y viceversa son escasos. La evaluación del sueño desde una perspectiva diádica es importante, ya que la mayoría de los adultos duerme acompañado. Asimismo, aproximadamente un tercio de los adultos casados o que conviven con sus parejas refieren que sus relaciones íntimas se ven afectadas por los trastornos del sueño. También se informó que las mujeres cuyos maridos roncan tienen más probabilidades de presentar insomnio y otras alteraciones del sueño. Es decir, la presencia de trastornos del sueño en un integrante de la pareja puede aumentar el riesgo de que el otro presente un trastorno del sueño.
También debe tenerse en cuenta que la pareja es una fuente importante de control social y ejerce una influencia significativa sobre la adhesión al tratamiento. Además, la pareja es una fuente de información a la hora de realizar el diagnóstico de trastornos como la apnea del sueño. En consecuencia, la inclusión de las parejas en el tratamiento de los trastornos del sueño puede mejorar la adhesión y la costo-eficacia del tratamiento. Otra cuestión a destacar es que los eventos vitales como la transición hacia la paternidad o la adaptación a una enfermedad afectan el sueño y disminuyen la calidad marital. En consecuencia, la calidad del sueño sería importante respecto del funcionamiento marital. Por último, la evaluación del sueño puede esclarecer las vías mediante las cuales las relaciones íntimas influyen sobre el bienestar y la salud física.
En resumen, la mayoría de los adultos duermen acompañados y, en algunos casos, puede observarse la presencia simultánea de trastornos del sueño y problemas de pareja. No obstante, los datos respecto de la conexión entre las relaciones cercanas y el sueño son escasos. En consecuencia, el objetivo de la presente revisión fue evaluar los datos existentes respecto del efecto de dormir en pareja, del efecto de los trastornos del sueño sobre el funcionamiento interpersonal y del efecto de la calidad de la relación sobre la calidad del sueño.
Revisión de la literatura
La información fue obtenida mediante una búsqueda de estudios efectuada en diferentes bases de datos. La revisión de datos se dividió en 3 secciones: efecto de dormir junto con la pareja en la cama matrimonial, efecto de los trastornos del sueño sobre el funcionamiento interpersonal y efecto del funcionamiento interpersonal sobre el sueño.
A pesar de la naturaleza diádica del sueño observada en la mayoría de los adultos, sólo se identificaron 5 estudios al respecto. En todos los trabajos se informó que dormir con la pareja tiene un efecto sobre los parámetros obtenidos mediante polisomnografía o actigrafía. Por ejemplo, no dormir junto con la pareja se asociaría con disminución significativa del sueño de movimientos oculares rápidos (REM) y con aumento del estadio 4 del sueño no REM. No obstante, los pacientes generalmente refieren menor satisfacción al dormir sin sus parejas, a pesar de los resultados de los parámetros objetivos. También se informó que la mejoría de la apnea del sueño se asocia con una disminución de la cantidad de despertares y aumento significativo de la eficiencia del sueño de la pareja sana.
En cuanto al efecto de los trastornos del sueño sobre las relaciones de pareja, se informó una relación adversa entre la apnea del sueño y la satisfacción marital. En cambio, en otro estudio no se hallaron diferencias en términos de satisfacción marital en presencia o ausencia de apnea del sueño. También se informó que las esposas de los pacientes con apnea del sueño refirieron menor satisfacción respecto de las características del sueño de su esposo. Asimismo, fueron más propensas a dormir separadas de ellos. Es decir, a pesar de la heterogeneidad de los resultados, el tratamiento de los pacientes con apnea del sueño favorecería el funcionamiento de la pareja. En cuanto a la asociación entre otros trastornos del sueño y la calidad de la relación marital, los estudios son escasos. Por último, los autores sugieren que las parejas que deben lidiar con otros tipos de enfermedades en la familia presentan aumento de la vulnerabilidad ante los trastornos del sueño e interpersonales.
Respecto del efecto de la calidad de las relaciones matrimoniales sobre el sueño, las diferencias de calidad de las relaciones interpersonales pueden tener consecuencias significativas sobre el sueño. Se propuso que las relaciones seguras favorecen la salud al brindar un sentido de seguridad y pertenencia. Este sentido fomenta la presencia de estrategias de afrontamiento efectivas y reduce las respuestas de estrés fisiológico y psicológico. En cambio, los sujetos involucrados en relaciones inseguras, especialmente aquellos caracterizados por estilos de apego ansioso o preocupado, serían especialmente vulnerables ante el estrés. En coincidencia, en estudios previos se informó una asociación significativa entre el apego inseguro y la calidad subjetiva del sueño.
Resultados de la revisión efectuada
En la mayoría de los estudios acerca de la influencia de los trastornos del sueño sobre el funcionamiento marital se hallaron asociaciones significativas entre estos factores. Asimismo, se sugirió que la calidad marital mejora al tratar los trastornos respiratorios del sueño. También se sugirió que las características de las relaciones íntimas se asocian con la calidad del sueño. No obstante, los hallazgos de los estudios fueron heterogéneos y se detectaron limitaciones metodológicas que no permitieron la obtención de conclusiones definitivas respecto de la relación causal entre los trastornos del sueño y la calidad de las relaciones maritales. En la mayoría de los estudios se evaluaron los efectos de la apnea o los ronquidos sobre el funcionamiento de la pareja. No obstante, es posible que este funcionamiento se vea afectado por la presencia de otros trastornos del sueño como el insomnio. Los datos al respecto son escasos.
La conceptualización de los trastornos del sueño desde una perspectiva diádica es beneficiosa, dado que permite validar las necesidades y preocupaciones de ambos miembros de la pareja. Además, brinda un incentivo superior para iniciar y mantener las recomendaciones terapéuticas. Los efectos de dormir acompañado sobre los parámetros objetivos y subjetivos del sueño indican la importancia de considerar las características habituales del sueño al interpretar los datos obtenidos en laboratorios, en los cuales el paciente generalmente duerme solo. Por último, es probable que la relación entre el sueño y la calidad de la relación interpersonal sea bidireccional. No obstante, en la mayoría de los estudios sólo se evalúa la relación unidireccional entre los trastornos del sueño y la insatisfacción marital.
Modelo conceptual de asociación entre el sueño y la relación marital
Los autores proponen que los aspectos positivos y negativos del funcionamiento interpersonal se relacionan con el sueño mediante su influencia sobre mecanismos psicológicos, conductuales, cronobiológicos y fisiológicos. En una situación funcional, la pareja actúa como moderador, disminuye la respuesta al estrés y favorece conductas saludables y disuade las conductas con impacto negativo sobre el sueño. En cambio, las relaciones negativas son una fuente principal de estrés y aumentan el riesgo de trastornos del sueño. Asimismo, las alteraciones del sueño pueden tener efectos adversos sobre el funcionamiento marital al afectar la regulación de las emociones y aumentar el riesgo de trastornos psiquiátricos.
Los individuos involucrados en relaciones de mayor calidad generalmente son más felices y más sanos en comparación con los sujetos que no están en pareja o cuyos matrimonios no son satisfactorios. Esto se debe a diversas razones aparentemente relacionadas con el sueño. Por ejemplo, el matrimonio previene el aislamiento social, el cual a su vez se relaciona con la presencia de trastornos del sueño. Además, la pareja puede funcionar como apoyo y confidente y permitir la disminución de la cantidad de pensamientos intrusivos que afectan el sueño.
Las esposas pueden tener una influencia positiva sobre la salud como el mantenimiento de hábitos adecuados de sueño, la realización de actividad física o la adhesión al tratamiento en caso de trastornos del sueño. En cambio, en las relaciones disfuncionales, las esposas pueden presentar comportamientos no saludables que afectan el sueño. Los autores sugieren que el ritual de dormir acompañado sería un factor motivador para mantener rutinas de sueño relativamente constantes. La relación entre el funcionamiento interpersonal y el sueño también estaría influida por sus efectos sobre diferentes vías fisiológicas como el eje hipotalámico-pituitario-adrenal, el sistema nervioso autónomo, los procesos inflamatorios y las vías mediadas por la ocitocina. Por ejemplo, se sugirió una asociación entre la activación fisiológica crónica y el insomnio.
Factores de vulnerabilidad
La asociación entre la calidad de la relación marital y el sueño estaría influida por diferentes factores de vulnerabilidad. Entre ellos se incluyen las características de la personalidad, los factores socioeconómicos y ocupacionales, los eventos vitales y el sexo. Por ejemplo, se informó que la presencia de conflictos interpersonales y emociones negativas se asocia con el aumento de la cantidad de trastornos del sueño, especialmente en los sujetos que presentan hostilidad y cinismo. Del mismo modo, la relación entre la calidad de las relaciones interpersonales y el sueño sería especialmente pronunciada en sujetos con trastornos psiquiátricos preexistentes. Las alteraciones del sueño exacerbarían los síntomas psiquiátricos preexistentes, lo cual tendría un efecto negativo sobre las relaciones de pareja. Asimismo, la presencia de trastornos psiquiátricos contribuiría con los problemas interpersonales, lo cual a su vez aumentaría la cantidad de alteraciones del sueño.
Se sugiere que la calidad de las relaciones y el sueño se asociarían de manera causal. No obstante, la escasez de datos al respecto impide la obtención de conclusiones definitivas respecto de la causalidad. Las relaciones de pareja saludables favorecerían los patrones saludables de sueño. En cambio, las relaciones no saludables conducirían a mayor cantidad de trastornos del sueño. También existiría una relación reversa según la cual los trastornos del sueño contribuyen con la presencia de relaciones no saludables al afectar la regulación de las emociones y el funcionamiento cognitivo.
Conclusión
Es necesario el reconocimiento de la naturaleza diádica del sueño y su incorporación en la práctica clínica y en la investigación, dado que puede permitir el descubrimiento de los mecanismos involucrados en la etiología y el mantenimiento de los trastornos del sueño y de los problemas de pareja. De este modo será posible diseñar nuevas estrategias terapéuticas.
Especialidad: Bibliografía - Clínica Médica