Importancia de Valorar la Depresión en Pacientes que Sobreviven a un Cáncer de Mama

• AUTOR : Reyes-Gibby CC, Anderson KO, Hassan S y colaboradores
• TITULO ORIGINAL : Depressive Symptoms and Health-Related Quality of Life in Breast Cancer Survivors
• CITA : Journal of Women’s Health 21(3):311-318, Mar 2012
• MICRO : Tanto el diagnóstico como el tratamiento del cáncer de mama afectan la calidad de vida y el bienestar de las pacientes. Una de las enfermedades que puede observarse con mayor frecuencia en esta situación es la depresión, cuyo diagnóstico y tratamiento adecuados son fundamentales.

Introducción y objetivos

El tipo de cáncer más prevalente en mujeres es el de mama. Gracias a los avances terapéuticos, en la actualidad se prolongó la supervivencia de estas pacientes en forma significativa. Tanto el diagnóstico como el tratamiento del cáncer de mama afectan la calidad de vida y el bienestar de las pacientes. Una de las complicaciones que puede observarse con más frecuencia en estas circunstancias es la depresión. Por lo tanto, comprender las características de esta enfermedad en la población de pacientes que sobrevive a un cáncer de mama es fundamental. Los efectos de la depresión en pacientes con cáncer de mama pueden observarse más allá del período de tratamiento. Según los hallazgos de un estudio, el tiempo transcurrido desde el diagnóstico o el tratamiento influye sobre la prevalencia de depresión en mujeres que sobreviven a un cáncer de mama. Concretamente, se observaron prevalencias superiores al considerar grupos tratados más recientemente. La información sobre los factores asociados con la depresión en sobrevivientes de un cáncer de mama es limitada.

El presente estudio se llevó a cabo en pacientes que han sobrevivido a un cáncer de mama y que habían recibido quimioterapia entre 1994 y 2001. El objetivo fue obtener información de utilidad para mejorar el tratamiento de la depresión y la calidad de vida de las pacientes que sobreviven a un cáncer de mama. Los autores evaluaron la prevalencia de síntomas depresivos y su asociación con la calidad de vida. También, se evaluó la relación entre diferentes factores vinculados con la enfermedad oncológica y la depresión.

Pacientes y métodos

Participaron 240 pacientes que habían sobrevivido a un cáncer de mama, quienes fueron evaluadas mediante el 8-item Patient Health Questionnaire (PHQ-8) con el fin de valorar la sintomatología depresiva.

Los resultados obtenidos permitieron dividir a las pacientes según la presencia o la ausencia de depresión. El European Organizations for Research and Treatment of Cancer Quality of Life Questionnaire Core 30 (EORTC QLQ-C30) se empleó con el fin de valorar la calidad de vida relacionada con la salud.

Finalmente, se incluyeron preguntas destinadas a recavar información sociodemográfica, evaluar factores relacionados con la enfermedad y condiciones comórbidas.

Resultados

La media de edad de las pacientes fue de 58 años. La mayoría era de origen caucásico, casada y con estudios secundarios completos. El período promedio transcurrido desde el tratamiento fue de 7.9 años. El 9% y 8% presentaban recurrencias locales y metástasis. Las comorbilidades más frecuentes incluyeron hipertensión arterial, artrosis, diabetes y artritis reumatoidea.

Los resultados del PHQ-8 indicaron que el 16.2% de las pacientes tenía depresión. En general, la prevalencia de depresión disminuyó con el tiempo transcurrido desde el tratamiento. En comparación con lo observado en ausencia de depresión, la presencia de depresión se asoció con puntajes más bajos vinculados con el funcionamiento físico, cognitivo, emocional y social. También, se encontró una asociación entre la depresión y la fatiga, el dolor, el insomnio, la disminución del apetito, la diarrea y la disnea. La obtención de puntajes mayores o iguales a 10 en el PHQ-8 se asoció con una carga económica elevada y con puntajes bajos vinculados con la salud global en comparación con la obtención de puntajes menores de 10. De acuerdo con el análisis de regresión logística multivariable llevado a cabo, la edad menor, la artritis reumatoidea y los años transcurridos desde el tratamiento se correlacionaron de manera significativa con la presencia de depresión.

Discusión

En relación con los resultados obtenidos en este estudio, el 16% de las pacientes que sobrevivió a un cáncer de mama presentó depresión. Este hallazgo coincide con lo informado en estudios anteriores. Por lo tanto, afirman los autores, es necesario monitorizar la presencia de depresión en esta población de pacientes. También, se observó una disminución de la prevalencia de depresión a medida que se prolongó el período transcurrido desde el tratamiento; este hallazgo coincide con el de otros estudios. Es posible que la alta incidencia de depresión durante el período inmediato posterior al diagnóstico y al tratamiento se vincule con el temor a la muerte, con la aparición de recurrencias y con los efectos adversos del tratamiento.

Al igual que en otros estudios, los autores observaron una relación significativa entre la depresión y la calidad de vida. El tratamiento inadecuado de la depresión se asocia con malestar, disfunción física y mal funcionamiento en el ámbito de las relaciones sociales. Por lo tanto, el diagnóstico y el tratamiento de la depresión en pacientes que sobreviven a un cáncer de mama son fundamentales. Si bien en la actualidad se cuenta con buenas herramientas de evaluación, es necesario disponer de estudios adicionales que permitan identificar las estrategias más eficaces de detección sistemática de depresión en pacientes que sobreviven a estos tumores.

La depresión se asoció con una carga económica significativa, tanto para las pacientes como para la sociedad. De hecho, el costo de la depresión para la sociedad es mayor en comparación con el costo de otras enfermedades crónicas, como la hipertensión arterial, el asma o la artritis reumatoidea. Tanto la fatiga como el insomnio y el dolor se asociaron significativamente con la depresión, lo cual aumenta la complejidad del tratamiento. Podría ser útil realizar estudios clínicos y aleatorizados sobre el tratamiento de las pacientes que sobreviven a un cáncer de mama y presentan depresión asociada con otros síntomas, como el dolor o los trastornos del sueño.

La menor edad fue un factor de riesgo significativo para la aparición de depresión en pacientes que sobrevivieron a un cáncer de mama. Esto podría vincularse con el temor a la muerte, la desorganización de la vida familiar y la posibilidad de infertilidad y menopausia prematuras debido al tratamiento, entre otras cuestiones. La depresión también se asoció con la presencia de artritis reumatoidea, la cual constituye un factor de riesgo independiente de depresión. Además, tanto el dolor como la fatiga son síntomas de la artritis reumatoidea y predicen la aparición de depresión. Finalmente, la recurrencia de la enfermedad no fue un factor de riesgo significativo de depresión, a diferencia de lo informado en otros estudios.

Entre las limitaciones del presente estudio, los autores mencionan, en primer lugar, que las características de la población evaluada dificultan la generalización de los resultados a todas las pacientes que sobreviven a un cáncer de mama. En segundo lugar, la cantidad de participantes fue limitada. Por último, no fue posible definir la causalidad de la asociación entre los factores evaluados y la depresión. Es necesario contar con estudios adicionales prospectivos que incluyan períodos prolongados de seguimiento y permitan comprender mejor la asociación entre las variables evaluadas en el presente estudio.

Conclusión

Los avances terapéuticos en el campo del cáncer de mama se asocian con aumento de la cantidad de pacientes que tiene una supervivencia prolongada, quienes pueden presentar efectos tardíos de la enfermedad y requerir atención con el fin de superarlos. Entre dichos efectos se destaca la depresión, enfermedad que requiere un diagnóstico y tratamiento oportunos.

Especialidad: Bibliografía - Ginecología - Oncología - Psiquiatría