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Investigan la Actividad Antihipertensiva de Ciertas Hierbas Medicinales

  • AUTOR : Tabassum N, Ahmad F
  • TITULO ORIGINAL : Role of Natural Herbs in the Treatment of Hypertension
  • CITA : Pharmacognosy Reviews 5(9):30-40, Ene 2011
  • MICRO : La adopción hierbas naturales en el tratamiento de la hipertensión ha sido utilizada, principalmente, por poblaciones rurales de países más carenciados, en donde los recursos son menores y el acceso a los medicamentos, menos común.

 

Introducción

La hipertensión arterial (HTA) es una enfermedad crónica caracterizada por el incremento de la presión arterial. Su etiología puede ser idiopática o secundaria; en el 95% de los casos se observa el primer caso, también llamada HTA esencial. Las formas secundarias se deben a enfermedades renales, del sistema endocrino o del propio sistema circulatorio. La HTA es uno de los principales factores de riesgo de eventos vasculares, insuficiencia cardíaca, aneurismas arteriales y evolución hacia la insuficiencia renal crónica. Habitualmente, la HTA se clasifica en sistólica o diastólica; existen, además, otras subclasificaciones que la dividen en estadio I, estadio II e HTA sistólica aislada con presión diastólica normal; esta última es más común en personas ancianas. Los individuos mayores de 50 años se consideran hipertensos cuando alcanzan valores de presión arterial sistólica y diastólica por encima de 140/90 mm Hg, respectivamente. En cambio, los sujetos más jóvenes pero con otras comorbilidades, como diabetes o enfermedades renales, se consideran hipertensos con valores superiores a 130/80 mm Hg. Otra forma es la HTA del ejercicio, que sólo se manifiesta ante un esfuerzo físico. En estos casos se acepta un valor de presión arterial sistólica de entre 200 y 230 mm Hg. La presencia de HTA prolongada en el tiempo es un factor de riesgo para accidente cerebrovascular, infarto cardíaco, insuficiencia cardíaca e insuficiencia renal. También se ha comprobado que la elevación moderada de la presión arterial disminuye la expectativa de vida. Entre las medidas para controlar esta afección se encuentran los cambios en los hábitos nutricionales y del estilo de vida, además de la implementación de tratamientos farmacológicos.

Si bien la forma más común de HTA, la forma esencial o idiopática, no presenta un diagnóstico etiológico, se ha comprobado que existen ciertos factores asociados, entre ellos, sedentarismo, estrés, obesidad visceral, hipokalemia, obesidad, sensibilidad a la sal, consumo de alcohol o deficiencia de vitamina D. Más del 85% de los pacientes con HTA presentan un índice de masa corporal mayor a 25. También son factores asociados la edad, los antecedentes familiares y ciertas condiciones genéticas. Una elevación de la concentración de renina en sangre es otro factor de riesgo que se relaciona con alteraciones del funcionamiento renal. Además, se puede observar una elevada actividad del sistema nervioso simpático. La presencia de síndrome metabólico, así como la ingesta de alimentos que contienen jarabe de maíz con alto contenido de fructosa (idéntico al azúcar), son otros factores que predisponen a la HTA.

Fisiopatología de la HTA

Si bien es posible determinar los mecanismos subyacentes a la HTA secundaria, es más difícil comprender la fisiopatología de la HTA esencial. Sin embargo, es sabido que existe un incremento del gasto cardíaco desde las fases iniciales, con mantenimiento de la resistencia vascular periférica dentro de valores normales. Con la evolución de la enfermedad, esta relación se invierte y aumenta la resistencia periférica, mientras que el gasto cardíaco retorna a niveles normales. Existen tres teorías que intentan explicar este fenómeno. La primera de ellas sugiere la existencia de una dificultad del riñón para excretar el sodio, lo cual genera la producción de factores natriuréticos que, a su vez, desencadenan un incremento en la resistencia vascular periférica. Otra postura afirma que la causa inicial es un estado de hiperactividad del sistema renina-angiotensina, lo cual genera un incremento de la resistencia periférica y retención de sodio y agua, con el consiguiente incremento en el volumen plasmático. Finalmente, algunos autores suponen que la HTA se genera a partir de la hiperactividad del sistema nervioso simpático, lo cual produce un estado de estrés constante. También es sabido que la HTA es hereditaria; sin embargo, se ha avanzado poco en el descubrimiento de genes que favorecerían una predisposición a que se manifieste la enfermedad. Uno de los descubrimientos recientes que ha ganado la adhesión de varios investigadores es la asociación entre el daño del endotelio vascular y la presencia de HTA. No obstante, no ha podido dilucidarse qué fenómeno sucede en primera instancia.

Tratamiento mediante plantas medicinales

Durante las últimas tres décadas se ha realizado un enorme esfuerzo en la investigación de distintas hierbas con propiedades hipotensoras o antihipertensivas, que llevaron a una clasificación de sustancias válidas para el tratamiento de la HTA. La utilización de esta alternativa terapéutica ha sido adoptada principalmente por poblaciones rurales de países más carenciados, en donde los recursos son menores y el acceso a fármacos es menos común. Sin embargo, aún deben realizarse estudios para comprobar la eficacia y la seguridad de la mayoría de las hierbas utilizadas.

En este trabajo se realizó una revisión de las publicaciones dedicadas a la investigación de plantas medicinales utilizadas en el tratamiento de la HTA que ya han sido analizadas científicamente.

Plantas medicinales para el tratamiento de la HTA

Allium sativum, o ajo, es una hortaliza cuyo bulbo se emplea comúnmente en la cocina mediterránea. Esta planta ha sido empleada en una gran variedad de alteraciones cardiocirculatorias, especialmente para el tratamiento de las dislipidemias. Se ha comprobado que cuenta con propiedades hipotensoras. Su ingesta produce el incremento de óxido nítrico, lo que favorece la relajación de la capa muscular de las paredes arteriales. Según lo observado en varios estudios científicos, este efecto se produce en caso de que la persona presente elevación de la presión arterial, mientras que no genera cambios en caso de mantenerse los valores normales. Su acción ha sido probada en un ensayo clínico, y se obtuvieron resultados favorables en comparación con un grupo placebo.

Annona muricata, guanábana o graviola, es un árbol de hoja perenne, endémico, del Caribe mexicano, Centroamérica y Sudamérica. Se ha observado que la preparación de un extracto de la hoja favorece la regulación de la HTA, ya que su acción reside en reducir la resistencia vascular periférica.

Apium graveolens, conocido como apio, es una especie vegetal perteneciente a la familia de las apiáceas. Según la medicina china, esta planta favorece la función del sistema cardiocirculatorio actuando a través del hígado. En un estudio en que se utilizó el jugo de apio se obtuvieron resultados favorables para reducir los valores de presión arterial diastólica y sistólica. También, parece resultar eficaz en el tratamiento de la HTA asociada con el embarazo.

Artocarpus altilis, árbol del pan o frutipan, es una variedad originaria de Indonesia. Se ha comprobado que el extracto de hojas de esta planta disminuye la presión arterial, según estudios experimentales con cerdos.

Avena sativa, avena, es un cereal muy utilizado en la alimentación. La ingesta de avena rica en fibra favorece la regulación de la presión arterial y previene la necesidad de requerir fármacos antihipertensivos. Además, disminuye el riesgo de enfermedades cardiocirculatorias por su acción sobre el metabolismo de los lípidos y la glucosa.

Camellia sinensis, o planta de té, es la especie cuyas hojas y brotes se utilizan para elaborar té. Es una de las hierbas fundamentales utilizadas en la medicina china; se ha encontrado una asociación entre el consumo de té verde y un menor riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares.

Cassia absus es una hierba común en la India. Se ha registrado que la administración por vía intravenosa causa una disminución de la presión arterial dependiente de la dosis.

Cassia occidentalis, o hierba de café, es un árbol de tamaño pequeño; con sus hojas se elabora un preparado inyectable que funciona como agente antihipertensivo. Los estudios in vitro han comprobado que genera la relajación de las paredes aórticas. Su mecanismo de acción parece explicarse por la inducción de relajación que inhibe el flujo de calcio por medio de los receptores de los canales de este ión.

Crataegus pinnatifida, o espino chino, era utilizado para el tratamiento de la HTA en la antigua China, mediante decocción. Su efecto ha sido comprobado en varios estudios científicos. Las dos sustancias principales que benefician el sistema circulatorio son los flavonoides y las procianidinas oligoméricas, las cuales son poderosos agentes antioxidantes. Entre los mecanismos de acción, se encuentran la relajación de las paredes vasculares mediante el óxido nítrico, actividad antioxidante e incremento del tono de los miocitos cardíacos.

Daucus carota, o zanahoria, también ha sido tradicionalmente utilizada para el tratamiento de la HTA. La administración intravenosa de dos sustancias obtenidas de esta planta causa la disminución de la presión arterial dependiente de la dosis. Es probable que el mecanismo de acción sea el bloqueo de los canales de calcio.

Fuchsia magellanica, fucsia o pendientes de reina, es una planta nativa del sur de Argentina y Chile. La ingesta de una infusión preparada con extracto de sus hojas disminuye la temperatura corporal, funciona como diurético y reduce el nivel de presión arterial. Su efecto está comprobado en estudios experimentales con animales.

Hibiscus sabdariffa, o rosela, es una de las plantas más estudiadas hasta la actualidad. Las hojas y los cálices son utilizados en medicina por varias culturas africanas. Se ha comprobado el efecto antihipertensivo del cáliz de esta planta. La administración de 20 mg/kg por vía intravenosa del extracto del cáliz seco produjo una disminución de la presión arterial en modelos de hipertensión en ratas. Su acción se relaciona con fenómenos de relajación vascular mediados por acetilcolina e histamina. También se ha probado su eficacia en seres humanos.

Conclusión

El renovado interés por el descubrimiento de nuevas drogas derivadas de fuentes naturales, especialmente de plantas medicinales, ha cautivado la atención de la comunidad médica. La selva tropical es el medioambiente de mayor interés, por su biodiversidad, de allí se obtienen gran cantidad de sustancias con estructuras químicas nunca vistas hasta el momento. Es probable que, en el futuro, las hierbas naturales sean una opción más viable y menos perjudicial que los fármacos, para muchas de las afecciones presentes en la actualidad.

Especialidad: Bibliografía - Farmacología

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