Quetiapine Safety in Older Adults: A Systematic Literature Review

• TITULO : Seguridad de la Quetiapina en Adultos Mayores
• AUTOR : El-Saifi N, Moyle W, Jones C, Tuffaba H
• TITULO ORIGINAL : Quetiapine Safety in Older Adults: A Systematic Literature Review
• CITA : Journal of Clinical Pharmacy and Therapeutics 41(1):7-18, Feb 2016
• MICRO : El presente trabajo caracteriza la seguridad de la quetiapina en pacientes de 65 años o más. La información disponible apunta a orientar a los clínicos en la prevención y el control de los eventos adversos de este antipsicótico en dicha población.

Introducción

En Australia, los trastornos mentales y conductuales son un problema de salud creciente, y un fenómeno similar se observa en otros países desarrollados. Debido al envejecimiento de la población, se predice que el número de adultos mayores con trastornos mentales aumentará en los próximos años, lo que traerá aparejado un aumento de los costos y de la carga a los sistemas de salud. Los trastornos mentales más frecuentes en los adultos mayores suelen tratarse con antipsicóticos. Entre ellos, se definen 2 clases según sus mecanismos de acción y sus perfiles de eventos adversos. Por un lado, se encuentran los antipsicóticos de primera generación (APG), como el haloperidol; por el otro, existen los antipsicóticos de segunda generación (ASG), como la clozapina, la olanzapina, la quetiapina y la risperidona.

Usualmente, se asocia a los ASG con un perfil con menos efectos adversos. La quetiapina en particular se utiliza por vía oral para el tratamiento de diversos trastornos mentales, con tasas elevadas de uso no contemplado por sus indicaciones. Este fármaco suele acarrear un alto costo en salud en países desarrollados. Sus eventos adversos más frecuentes son la somnolencia, los mareos, la xerostomía, la constipación, la hipotensión ortostática y el aumento de peso, con baja incidencia de discinesias tardías y síntomas extrapiramidales; sin embargo, la información disponible proviene de ensayos clínicos aleatorizados que toman en cuenta su uso en indicaciones formales del agente. Asimismo, existen advertencias acerca de su empleo en pacientes mayores con demencia, debido a un posible aumento del riesgo de mortalidad, especialmente por causas cardiovasculares o infecciosas. Por otro lado, no se cuenta con revisiones sistemáticas sobre la seguridad de la quetiapina en adultos mayores.

El presente artículo es una revisión sistemática de los eventos adversos relacionados con la quetiapina en adultos de 65 años o más.

Métodos

Los autores realizaron una revisión sistemática basada en normativas internacionales, sobre diversas bases de datos reconocidas, como Cochrane, PubMed, Medline y Psycinfo. La búsqueda incluyó artículos de estudio efectuados en seres humanos, escritos en inglés, publicados entre enero de 2005 y marzo de 2015 inclusive, con combinaciones de diversos términos relacionados con la seguridad de la quetiapina. Los criterios de inclusión requerían una población de adultos mayores o una edad promedio de 65 o más años entre los participantes, el uso de quetiapina en las dosis recomendadas (25 mg/día a 800 mg/día) y el informe de eventos adversos asociados específicamente con la quetiapina. Se excluyó a los trabajos que no cumplían con estos criterios, así como a los que comunicaban efectos de sobredosis o toxicidad, los que incluyeron eventos adversos debidos a errores médicos y las revisiones narrativas, metanálisis y editoriales.

Resultados

La búsqueda inicial arrojó 3324 artículos, 1980 de los cuales fueron juzgados como relevantes. Luego de una revisión de los títulos y resúmenes, se llegó a 200 artículos con posibilidades de inclusión. De estos últimos, 62 trabajos cumplieron con los criterios de inclusión.

No se hallaron revisiones sistemáticas sobre la seguridad de la quetiapina en adultos mayores. Treinta y cuatro estudios (55%) fueron observacionales; los trabajos restantes fueron ensayos clínicos aleatorizados (n = 13, 21%), informes de casos (n = 14, 22.5%) y análisis poshoc (n = 1, 1.5%). La mayor parte de la utilización de quetiapina se debía a usos por fuera de sus indicaciones, como demencia, psicosis, estrés postraumático e insomnio. Los hallazgos se presentan según el tipo de evento adverso.

Trastornos del sistema nervioso

Un total de 19 estudios informaron eventos adversos a nivel del sistema nervioso; este tipo de reacciones adversas fueron las más frecuentes, sin importar la indicación del fármaco ni el diseño del estudio. Los eventos adversos más frecuentes fueron la sedación (8% al 11%), la somnolencia (25% al 39%) y los mareos (35%). En uno de los trabajos, los individuos que recibieron quetiapina presentaron un mayor deterioro cognitivo que los que recibieron placebo. Los síntomas extrapiramidales fueron raros y similares a los observados en participantes no expuestos al fármaco.

Trastornos cerebrovasculares

Seis trabajos evaluaron el riesgo de eventos adversos cerebrovasculares con el uso de quetiapina. La mayor parte de los participantes de estos estudios tenían un diagnóstico de demencia. En 3 de los estudios se evaluó específicamente esta reacción adversa como un criterio de valoración. Dos de ellos mostraron tasas similares (0.6% y 1.9%), mientras que el protocolo restante (con una tasa del 21%) tenía importantes diferencias con los 2 primeros en cuanto al diseño, las definiciones utilizadas y la duración del seguimiento.

Trastornos cardiovasculares

El evento adverso cardiovascular más frecuente fue la hipotensión ortostática; además, esta reacción adversa fue de carácter grave y, en muchos casos, llevó a la interrupción de la administración de la quetiapina. Un análisis post hoc demostró una mayor incidencia de eventos cardiovasculares.

Caídas y fracturas

Seis estudios informaron caídas y fracturas asociadas con el uso de quetiapina, generalmente en adultos mayores con demencia.

Trastornos metabólicos y nutricionales

En 19 trabajos se comunicaron alteraciones metabólicas relacionadas con el uso de quetiapina. Entre los eventos adversos informados se destacan el aumento de peso, el incremento de los valores de glucemia, la aparición de diabetes tipo 2 y de alteraciones en el lipidograma. Sin embargo, la frecuencia de los cambios en la glucemia y el perfil lipídico no se diferenció estadísticamente de la de los individuos que no recibieron quetiapina, excepto por un estudio que señaló mayor frecuencia de aumento de los valores de triglicéridos plasmáticos. El aumento de peso fue más frecuente en las mujeres que en los varones.

Trastornos gastrointestinales

La xerostomía, la constipación, las náuseas y los vómitos fueron los eventos adversos gastrointestinales más frecuentes; la constipación llevó a la suspensión de la quetiapina en un 5% de los casos, en un estudio con pacientes con un episodio depresivo mayor. Existió, además, una comunicación de disfagia.

Infección

Se informaron infecciones urinarias, respiratorias altas, neumonías y de otros tipos.

Mortalidad

La tasa de mortalidad asociada con la quetiapina fue comunicada en 10 estudios, con metodologías, pacientes y resultados diversos. Un trabajo informó un aumento de la mortalidad en pacientes con parkinsonismo, mientras que otros no hallaron diferencias con los individuos que no recibieron quetiapina.

Trastornos psiquiátricos

En los diferentes estudios se verificaron agitación, insomnio, confusión, intentos suicidas y síntomas depresivos.

Quetiapina en comparación con otros antipsicóticos

En 14 estudios se compararon los eventos adversos relacionados con la quetiapina con los de otros ASG, principalmente risperidona. En 5 trabajos, la mortalidad con quetiapina fue significativamente menor que la asociada con el uso de risperidona. En cuanto al riesgo de eventos cerebrovasculares, éstos fueron menos frecuentes con quetiapina que con risperidona en 4 protocolos, con significación estadística en uno de ellos.

Discusión

El presente trabajo realizó una revisión sistemática de la literatura existente acerca de la seguridad y la tolerabilidad de la quetiapina en adultos mayores. La mayoría de los estudios incluidos comparaban a la quetiapina con otros ASG y utilizaban criterios de valoración primarios relacionados con la eficacia de los fármacos; la seguridad y la tolerabilidad eran, generalmente, criterios de valoración secundarios.

Los eventos adversos más frecuentes con el uso de quetiapina fueron los efectos sobre el sistema nervioso central, como la sedación y la somnolencia. Otra reacción adversa común fue la hipotensión ortostática. La frecuencia de los eventos adversos cardiovasculares fue muy variable entre los distintos estudios, probablemente por diferencias en las dosis utilizadas. Otros datos de interés son la mayor frecuencia de aumento de peso entre las mujeres y el carácter prevenible de varios efectos adversos con simples cambios en la dosificación de la quetiapina.

Entre las limitaciones de esta investigación pueden enumerarse las restricciones de la búsqueda bibliográfica a nivel del idioma y las fechas de publicación, así como la exclusión de distintas reacciones adversas vinculadas con las interacciones, las dosis excesivas, las titulaciones rápidas y las intoxicaciones. Asimismo, no se evaluó la presencia de sesgos según recomendaciones internacionales ni se pudo realizar un metanálisis dada la heterogeneidad de los protocolos revisados.

Conclusión

El presente trabajo caracteriza la seguridad de la quetiapina en pacientes de 65 años o más. La información disponible apunta a orientar a los clínicos en la prevención y el control de los eventos adversos de este antipsicótico en dicha población.

Especialidad: Pediatría