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Tanto el Tratamiento Antidepresivo como el Psicológico Representan Terapias Eficaces para el Síndrome de Intestino Irritable
- AUTOR:Ford A, Talley N, Moayyedi P y colaboradores
- TITULO ORIGINAL:Efficacy of Antidepressants and Psychological Therapies in Irritable Bowel Syndrome: Systematic Review and Meta-Analysis
- CITA: Gut 58(3):367-378, Mar 2009
Introducción
El síndrome de intestino irritable (SII) es un trastorno funcional del aparato digestivo que afecta a entre el 5% y el 20% de la población. Se calcula además que este síndrome representa aproximadamente un cuarto de las consultas ambulatorias de gastroenterología. Según la última revisión, su diagnóstico requiere la presencia de malestar o dolor abdominal asociado con cambios evacuatorios. Por esta razón, hay un gran interés en elaborar terapias eficaces para el tratamiento de este síndrome. Investigadores han demostrado que los pacientes con SII tienen mayor probabilidad de padecer trastornos de ánimo. Además, estos individuos presentan una hipersensibilidad visceral, la cual podría estar relacionada con el dolor abdominal crónico asociado con este síndrome. Debido a que los antidepresivos pueden modular la percepción del dolor, han sido utilizados con eficacia para el tratamiento del dolor crónico. Por estas razones, se esperaría que tanto el tratamiento antidepresivo como la terapia psicológica fueran útiles en pacientes con SII. Sin embargo, en varias revisiones sistemáticas realizadas para examinar los beneficios de estas intervenciones se ha llegado a conclusiones divergentes. En consecuencia, actualmente es incierto el papel de ambas terapéuticas en el tratamiento del SII. Los autores realizaron una revisión sistemática y metanálisis de los ensayos efectuados para determinar los efectos de la terapia antidepresiva y psicológica para el SII.
Métodos
Se realizó una búsqueda en las bases de datos MEDLINE, EMBASE y en el Cochrane Controlled Trials Register. Se seleccionaron ensayos aleatorizados y controlados que cumplieron con las siguientes características: 1) participantes adultos (> 16 años); 2) diagnóstico de SII basado en la opinión médica o criterios específicos; 3) antidepresivos comparados con placebo o tratamiento psicológico cotejado con placebo o terapia «habitual»; 4) tiempo de tratamiento y de seguimiento de al menos 7 días y 5) registro de la mejoría de los síntomas de SII luego del tratamiento.
Algunos de los términos de búsqueda incluyeron: irritable bowel syndrome, functional diseases, colon, IBS, psychotropic drugs, antidepressive agents, cognitive therapy, relaxation therapy, behavioural therapy e hypnotherapy, entre otros. El rastreo no fue limitado a un idioma en particular.
Los criterios principales de valoración examinados fueron el efecto del tratamiento antidepresivo y psicológico con respecto a los síntomas de SII al finalizarse estos. También se estudiaron los siguientes criterios de valoración secundarios: 1) eficacia de distintos medicamentos antidepresivos y terapias psicológicas en particular y 2) efectos adversos relacionados con un medicamento antidepresivo.
Los datos fueron reunidos por medio de un modelo de efectos aleatorios para evitar cualquier heterogeneidad entre los estudios. Las distintas intervenciones fueron comparadas contra placebo o contra la terapia «habitual» por medio del riesgo relativo (RR) de persistir con la sintomatología del SII. El número de pacientes que deben ser tratados para evitar los síntomas digestivos en uno de ellos y los intervalos de confianza del 95% fueron calculados del metanálisis.
Resultados
En total se identificaron 571 estudios en la búsqueda inicial, de los cuales sólo 32 cumplieron con los criterios de inclusión. De los artículos considerados en la revisión: 19 examinaron el tratamiento psicológico, 12 evaluaron el tratamiento antidepresivo y 1 comparó ambas intervenciones contra placebo.
Trece estudios examinaron la eficacia del tratamiento del SII con antidepresivos. Ocho de estos ensayos evaluaron antidepresivos tricíclicos, mientras que otros 4 lo hicieron con inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) y uno examinó a ambos. Cabe mencionar que 7 de estos trabajos correspondían a la atención secundaria y otros 6 a la atención terciaria. El análisis de estos estudios determinó que los medicamentos antidepresivos fueron asociados con un riesgo significativamente menor de padecer síntomas de SII comparado con placebo (RR = 0.66). El número de pacientes que se deben tratar para evitar los síntomas digestivos en un enfermo fue 4. Además, se concluyó que tanto los antidepresivos tricíclicos como los ISRS fueron eficaces para reducir los síntomas del SII (RR = 0.68 y 0.62, respectivamente) respecto del placebo.
Sólo 6 de estos estudios compararon el número de efectos adversos entre pacientes tratados con antidepresivos y placebo. Al analizar los datos de estos trabajos, se observó que la tasa de efectos no deseados se presentó en aquellos tratados con antidepresivos comparados con placebo, pero no alcanzó una diferencia significativa. Destacan que ninguno de los efectos adversos fue considerado grave.
Veinte estudios compararon la eficacia de distintos tratamientos psicológicos contra la terapia habitualmente instituida o considerada estándar para el SII. La mayoría de estos ensayos correspondía a la atención terciaria y sólo uno se relacionó con la atención primaria. De estos estudios: 6 utilizaron terapia cognitivo-conductual (TCC); 4 terapia de relajación; 3 una terapia psicológica multifacética; 2 terapia hipnótica; 2 psicoterapia dinámica; 1 una TCC autoadministrada; 1 terapia antiestrés y 1 combinó TCC y de relajación. En estos trabajos, el grupo control fue: monitoreado en 11 casos, o tratado en forma habitual con medidas paliativas y con placebo en 7, 1 y 1 de los estudios, respectivamente. Estos ensayos determinaron que, en general, la terapia psicológica redujo significativamente la incidencia de síntomas digestivos comparado con el monitoreo o la terapia «habitual» (RR = 0.67). El número de pacientes que deben ser tratados para evitar los síntomas digestivos en un enfermo también fue 4. Consideran importante mencionar que se observó cierta heterogeneidad entre las distintas terapias psicológicas. Citan que los RR de los grupos que recibieron terapia hipnótica o cognitivo-conductual, psicoterapia dinámica, terapia psicológica multifacética y de relajación fueron 0.48, 0.60, 0.60, 0.69 y 0.82, respectivamente, comparado con los grupos control.
Discusión
Los investigadores afirman que tanto la terapia antidepresiva como la psicológica son superiores al placebo o a la terapia «habitual» para el tratamiento del SII. Con ambas intervenciones el número de pacientes que deben ser tratados para evitar los síntomas digestivos en un individuo fue igual. Además, se observó que la eficacia de los ISRS fue comparable a la de los antidepresivos tricíclicos. Indican que aunque la tasa de efectos adversos fue mayor en aquellos tratados con antidepresivos comparados con los que recibieron placebo, esta diferencia no fue estadísticamente significativa. En general, el tratamiento psicológico presentó una eficacia similar a la observada con los antidepresivos. Sin embargo, la terapia de relajación no tuvo ningún efecto significativo con respecto a los síntomas digestivos. Indican además que no se pudo determinar la eficacia de la terapia antiestrés o la TCC autoadministrada debido a la escasez de estudios acerca de estas intervenciones.
Según los autores, las 6 revisiones sistemáticas realizadas acerca de la eficacia del tratamiento del SII con antidepresivos presentaron limitaciones metodológicas. Algunas de estas limitaciones fueron: las revisiones sólo incluyeron estudios publicados en inglés, no combinaron los datos para reproducir el efecto total de los antidepresivos, los datos fueron tomados de manera incorrecta. Por estas razones, no resulta sorprendente el hecho de que las distintas investigaciones no concuerden entre sí respecto de la eficacia de los antidepresivos en el tratamiento de este síndrome. Por otro lado, 2 de las revisiones previas concluyeron que la terapia psicológica podría ser útil para el tratamiento del SII. Sin embargo, en ambos casos no se recolectaron los datos necesarios para calcular el efecto de esta intervención.
La actual revisión sistemática presenta varias ventajas con respeto a las realizadas con anterioridad. En primer término, los investigadores utilizaron una metodología rigurosa con el fin de generar información científica de alta calidad. En segundo término, el análisis incluyó ensayos aleatorizados y controlados que fueron publicados no sólo en inglés. Además, se contactó a los investigadores de estudios potencialmente relevantes para obtener información o para excluir a pacientes con otros trastornos digestivos funcionales de los datos publicados. Este hecho permitió reunir información de estudios de alta calidad de aproximadamente 800 y 1 300 individuos con SII tratados con antidepresivos o terapias psicológicas, respectivamente. En tercer término, se combinaron los datos con el fin de representar el efecto terapéutico total de ambas intervenciones y calcular el número de pacientes que deben ser tratados para prevenir los síntomas digestivos en un enfermo.
Sobre la base de los resultados, concluyen que tanto los medicamentos antidepresivos como la terapia psicológica representan tratamientos eficaces para el SII a corto plazo. En consecuencia, recomiendan que se modifiquen las normas terapéuticas actuales para incluir estas intervenciones.
Especialidad: Bibliografía - Gastroenterología - Psiquiatría